Ubicado en el ‘Hotel Gourmand Valdepalacios’ (Toledo), cuenta con el asesoramiento gastronómico del chef Santi Santamaría y, desde hace pocos meses, el beneplácito de la Michelin
Nuestro recorrido por los restaurantes que han recibido recientemente su primera estrella Michelin nos ha llevado desde Madrid (Alboroque), a Vizcaya (Boroa), pasando por Girona (Els Tinars) o Sevilla (Abantal). Y no dejamos de viajar. Hoy en concreto lo hacemos hasta tierras toledanas (a nueve kilómetros de la ciudad de Oropesa y en plena naturaleza) para recalar en templo gastronómico del lujosísimo ‘Hotel Gourmand Valdepalacios’. Hablamos de ‘Tierra’, un restaurante que, sin llegar a los dos años de vida, ya se ha consolidado como una de las mecas culinarias de la península. La culpa (o al menos, gran parte de ella) la tiene su asesor gastronómico, el prestigioso chefSanti Santamaría, que con la estrella concedida el pasado noviembre a este local manchego, cuenta ya en su haber con un total de siete (a la de ‘Tierra’ se suman las tres que ostenta desde 1994 El Racó de Can Fabes; las dos del madrileño Santceloni y la otorgada a Evo hace un par de años).
Así, quien tenga la fortuna de viajar hasta los comedores de este restaurante tendrá la ocasión de encontrarse con una cocina muy apegada a la tierra (nunca mejor dicho; el nombre del local no es fruto de la casualidad) con el sello personal de Santamaría y capitaneada por el joven chef Ismael Delgado. De esta manera, en la carta convive toda la riqueza agrícola y culinaria de la zona (no faltan platos de migas, cabritos y corderos asados, codornices en escabeche...) con otras propuestas más vanguardistas pero siempre apegadas a la cocina de mercado donde lo más importante es el producto de temporada.
En el apartado de los vinos, como cabía esperar, los de la D. O Castilla-La Macha tienen especial protagonismo en una carta de caldos muy atractiva con referencias de culto tanto españolas como extranjeras.
Calidad y saber hacer para un restaurante en total consonancia con el hotel de cinco estrellas en el que se ubica (sito en una magnífica casa palaciega del siglo XIX) y donde el lujo es seña absoluta de identidad: spas, gimnasios, lago privado, piscinas climatizadas, 600 hectáreas de naturaleza en estado puro, habitaciones de más de 80 metros... Un refugio para el alma,...y para el paladar.
