Maribel Verdú está viviendo, a sus 44 años recién cumplidos, las mieles del éxito. Para ella no existe la crisis y tras finalizar el pasado verano su último trabajo con Gracia Querejeta, Felices 140, la actriz está ahora inmersa en su nuevo proyecto profesional para la gran pantalla, La punta del iceberg.
Se trata de la adaptación cinematográfica de una obra de teatro ganadora del Premio Tirso de Molina 2011 y el Premio Réplica 2012. En ella interpreta el personaje de Sofía Cuevas, una directiva de una multinacional a la que se le encarga una investigación para aclarar los motivos de tres suicidios que han ocurrido en la empresa. El reparto cuenta también con la participación de Carmelo Gómez, Álex García y Bárbara Goenaga, gran amiga de Maribel y con quien ha estado ensayando estas últimas semanas antes de comenzar el rodaje.
Pero como no todo puede ser trabajo, antes de comenzar el rodaje Maribel ha realizado una corta escapada a México para presentar la primera edición de los Premios Fénix creados para reconocer los esfuerzos que se realizan en América Latina, España y Portugal por invertir en el mundo del cine. Allí aprovechó para disfrutar de una de las fiestas más tradicionales del país, El día de muertos en el que las calles se engalanan con altares y ofrendas para honrar a los difuntos. Una vez de regreso a España, Maribel se unió al rodaje de la película en Madrid, concretamente en uno de los escenarios principales, un edificio inteligente de las afueras de la ciudad.
La actriz no olvidó llevarse al rodaje a su inseparable mascota, un pingüino de peluche, superpinguin como ella lo llama, que le acompaña en cada una de sus películas desde hace muchos años. La actriz siente predilección por estos animales, y los tiene como imagen en su perfil de Instagram. Precisamente en esta red social ha publicado muchas fotografías sobre estos simpáticos animales que adornan su vida y también su cuerpo. Hace varios años la actriz mostró un tatuaje con la figura de un pingüino en el lateral del torso.
Veintiocho años después de su debut en el cine como 27 horas, Maribel es ya una actriz de culto ya que al éxito en el cine se une también el triunfo sobre los escenarios teatrales junto a compañeros y amigos como Enma Suárez o Ariadna Gil con quien ha protagonizado obras de tanto éxito como Los hijos de Kennedy.
Por si no tuviera suficiente, Maribel está también preparando su regreso a televisión con la serie Cuestión de sangre en la que interpreta el papel de una policía que intenta defender a su hijo cueste lo que cueste. Su último trabajo en la pequeña pantalla fue Código fuego en 2003, por lo que la actriz está deseando que este proyecto vea finalmente la luz.
Pero la vida no sólo le sonríe a nivel profesional a la ganadora de dos Premios Goya y del Premio Nacional de Cinematografía ya que Maribel Verdú también ha alcanzado la plenitud sentimental junto a su marido Pedro Larrañaga, con quien ha cumplido quince años de matrimonio.
