No ha sido una, sino tres las veces que Robin Williams se ha casado. Pero tanto la celebración como la luna de miel la han vivido como si fuera la primera vez. El actor cómico y su esposa, la diseñadora gráfica Susan Schneider, han elegido como destino para su viaje de novios París. La ciudad del amor fue testigo del enamoramiento de esta pareja que fue fotografiada en plena plaza Vendome regalándose besos y caricias como dos enamorados adolescentes.
Una de las paradas fue la exclusiva joyería de Dior en la que el actor quiso agasajar a su mujer. Williams y Schneider se alojan en la suite Honeymoon del exclusivo hotel Lancaster de la capital francesa y fueron fotografiados mientras daban un romántico paseo por alguno de los lugares más emblemáticos de la ciudad. Al ver las imágenes, el actor, que ha cumplido 60 años parece estar viviendo su segunda juventud al lado de Susan.
Robin Williams y Susan Schneider pronunciaron el 'sí, quiero' el pasado 22 de octubre en el exclusivo resort Meadowood en Napa Valley, al norte de California. La pareja se conoció poco antes de que el cómico sufriera una insuficiencia cardiaca de la que tuvo que ser operado para colocarle una válvula en el corazón. Entonces Susan no se separó de su lado y se convirtió en su mejor enfermera, lo que le sirvió de vital ayuda en su recuperación.
Se trata de la tercera boda para el actor que es padre de tres hijos -Zachary, de 28, nacida de su primer matrimonio con Valerie Valardi, y Zelda, de 22, y Cody, de 19, nacidos de su segundo matrimonio con Masha Garces, que solicitó el divorcio del actor en 2008 tras diecinueve años de matrimonio.
