Hace tan sólo cuatro meses que el primer hijo de Marion Cotillard y Guillaume Canet llegó al mundo, y desde entonces no se ha separado de su mamá ni un sólo momento. La ganadora de un Oscar por su interpretación de Edith Piaf en el filme La vie en rose se ha convertido en una asidua de los aeropuertos debido al rodaje de su última película, la nueva entrega de Batman, The Dark Knight Rises (El caballero oscuro: La leyenda renace), que le ha obligado a trasladarse a Los Ángeles en varias ocasiones.
Así, durante estas últimas semanas hemos visto a la pareja y a su pequeño Marcel llegando al aeropuerto Charles de Gaulle de París (Francia), aunque en esta última ocasión no les acompañaba el actor y director francés. Marion, que lució figura con un mono de color teja, botas de estilo motero y sombrero borsalino, llevaba en brazos al que se ha convertido en el 'niño de sus ojos' y no dejó de hacerle caricias y darle besos. El nacimiento de su primer hijo ha sido, sin duda, su mejor regalo y, según sus propias palabras, está llevando la maternidad "con mucha tranquilidad". "No es que antes estuviera estresada, pero es que ahora me siento muy feliz. Ha nacido hace poco pero tengo la sensación de que siempre ha estado con nostros", aseguró con una gran sonrisa a los medios que se encontraban en el aeropuerto.
Para la actriz francesa ha sido muy emocionante participar en The Dark Knight Rises, dirigida por Christopher Nolan y en la que comparte cartel con Anne Hathaway y Christian Bale. "Estoy muy feliz de trabajar con Christopher. Podría hacer un montón de películas con él. The Dark Knight Riseses un proyecto enorme, pero al mismo tiempo es como trabajar en familia", aseguraba la actriz hace unos meses al canal MTV News. Está previsto que la cinta llegue a los cines el 20 de junio de 2012.
