Por mucho que algunos medios se empeñen en afirmar que su matrimonio está pasando por una crisis, lo cierto es que las últimas apariciones públicas de Tom Cruise y Katie Holmes no hacen más que desmentirlo. Si el pasado mes de diciembre les veíamos juntos y de la mano saliendo de una romántica cena con la que celebraron el 32 cumpleaños de la actriz, ahora ha sido Katie la que ha querido sorprender a su marido y ha viajado con su hija Suri hasta Vancouver (Canadá) para hacerle una visita en el set de rodaje de la cuarta parte de 'Misión Imposible'. Tom y Katie nos regalaron románticas instantáneas en las que compartieron besos, risas, confidencias y miradas llenas de ternura.
A su llegada, la pequeña se convirtió la protagonista indiscutible de una jornada en la que Tom, de 48 años, grabó varias escenas de acción del filme que se llamará Ghost Protocol. Suri presumió de papá y no pudo evitar quedarse con la boca abierta cada vez que le veía realizar complicados movimientos y carreras a toda velocidad. Es de sobra conocido que al actor no le gusta que le doblen en las escenas de acción, por lo que intenta mantener una buena forma física para que salgan lo mejor posible. La película, cuyo estreno está previsto para diciembre de 2011, está dirigida por Brad Brid y en el reparto acompañan a Tom Cruise, Jeremy Renner, Michael Nyqvist, Paula Patton y Josh Holloway -el popular Sawyer de Perdidos-, entre otros.
Horas antes de acudir al set de rodaje para sorprender al actor, Katie y su hija hicieron algunas compras en un centro comercial de Vancouver y una vez más pudimos comprobar por qué a sus cuatro años de edad, Suri es considerada como una de las niñas con más estilo de Hollywood.
La pequeña lució para la ocasión un vestido negro, abrigo de piel y originales botas de agua de color rosa y rojo. Por su parte, la actriz que alcanzó la popularidad con la serie Dawson Crece, se decantó por un look más sencillo en el que combinó unos cómodos vaqueros con una camisa y un 'plumas' negro. Juntas visitaron una tienda de libros, un supermercado y una floristería en la que compraron algunos ramos de llamativos colores.
