Un grupo de amigos se reúnen con sus respectivas familias en una casa junto a un lago para pasar el fin de semana y, además de recordar a su viejo entrenador de baloncesto fallecido, reviven lo mejor de su infancia. Las carcajadas están garantizadas. Este es el argumento de una de las comedias del verano, apta para todos los públicos, Niños grandes, que ha llegado ya a las pantallas españolas. No en un lago, pero sí al borde del mar, con los apetecibles paisajes de Mallorca de fondo, los actores de la cinta, Adam Sandler, Chris Rock, David Spade y Kevin James, presentaron un trabajo en el que, sin duda y a juzgar por sus declaraciones, se lo han pasado como auténticos “enanos”.
Bromistas, sin dejar de reírse y demostrando que antes de compañeros son buenos amigos (han coincidido en alguna ocasión trabajando en algunas cintas y en el programa Saturday night live, aunque esta es la primera vez que están todos, los cuatro, juntos), contestaron las preguntas de hola.com antes de disfrutar de una fiesta, al más puro estilo de las islas, con el blanco como color estrella y el mar y la luna de fondo.
Al evento no faltaron algunas caras muy conocidas del panorama español como Luis Medina, Javier García Obregón, Nuria March, Marisa Jara y su marido Chente (que de nuevo confesaron las ganas que tienen de ser padres) y Alejandra Prat y su marido Juan Manuel Alcaraz, de vacaciones con sus dos hijos y a quienes, Alejandra está deseándolo, no les importaría aumentar la familia.
Con cuatro cómicos de primera fila como ellos es imposible mantener la seriedad y así, cuando les preguntaron el motivo de la ausencia de Salma Hayek, que iba a venir con ellos a España, Adam Sandler dijo: “Salma tiene una casa muy grande y no la conoce bien así que se tropezó con algo y cuando llamó a la ambulancia ¡también se perdieron!”. Minutos después explicó que “se había hecho daño en los ligamentos” y que “estaba bien”.
El también productor y guionista de la película aseguró que se lo pasaron genial en el rodaje, no en vano, estaban entre amigos y que incluso ellos son más inmaduros que los propios personajes que interpretan. “Trata de hombres que en familia son responsables para dar ejemplo, pero cuando se juntan son más gamberros” comentó Sandler. Recordando cómo de niños jugaban más en la calle o hablaban en el coche durante un viaje porque “no había DVD en él” según Chris Rock, comentaron que intentan enseñar a sus propios hijos los juegos de antes pero sin perder de vista las nuevas tecnologías.
Precisamente mientras trabajaban tuvieron la oportunidad de pasar mucho tiempo con sus hijos. “Haciendo estas películas no estás tanto tiempo en la caravana, aprendiéndote el papel y puedes tener a los niños contigo. Somos afortunados”. Tan divertida ha sido la experiencia que no descartan repetir y, tal y como prometen, no tardarán demasiado. Seguro que muchos quieren que el momento llegue lo más rápido posible.
