Esta vez tampoco pudo ser, Penélope Cruz veía anoche cómo el Premio del Sindicato de Actores como Mejor Actriz de Reparto se le escapaba. Se trataba de su tercera nominación y tal y como ocurrió en la reciente entrega de los Globos de Oro, la actriz Mo'nique (Precious) le arrebató el galardón. No obstante, la española brilló con luz propia en una gala repleta de bellísimas mujeres con vestidos de ensueño.
Una vez más, Penélope apostó por el negro y lució un elegante vestido de cóctel con zapatos peep toes a tono. Aunque ni su película, Nine, ni ella misma se llevaron los galardones a los que optaban, la madrileña subió al escenario junto Marion Cotillard, Kate Hudson y Nicole Kidman, a la que demostró estar muy unida. Y es que Penélope Cruz es ya una más en Hollywood. La pudimos ver saludando efusivamente a Meryl Streep, Drew Barrymore o Rob Marshall, director del musical que ha protagonizado.
La de ayer fue una gala con pocas sorpresas y en la que Malditos Bastardos, de Quentin Tarantino, resultó la triunfadora con dos galardones. Se hizo con el premio a la Mejor Interpretación Conjunta y Christoph Waltz, se alzó como Mejor Actor de Reparto. Por su parte, Sandra Bullock resultó la Mejor Actriz por The blind side y el veterano Jeff Bridges vio recompensado su buen hacer al ser distinguido como Mejor Actor por su papel en Crazy Heart.
Uno de los momentos más emotivos de la gala llegó cuando Sandra Bullock entregó el Premio Honorífico del Sindicato de Actores a Betty de White, la inolvidable Rose de Las chicas de Oro. También hubo ocasión de reconocer el trabajo de los intérpretes en televisión, de ahí que Kevin Bacon y Drew Barrymore se convirtieran el Mejor Actor y Actriz, respectivamente.
