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Procedentes de París y Londres, donde se les ha visto más unidos que nunca, Robert Pattinson y Kristen Stewart aterrizaron en Madrid junto al también actor Taylor Lautner y el director Chris Weitz para presentar en España la esperada entrega de la saga Crepúsculo, Luna Nueva. Durante la rueda de prensa, el vampiro más atractivo del cine, de 23 años, y la bella Kristen, de 19, así como Taylor Lautner han hecho alarde de lo grandes amigos que son, al margen de la complicidad y química que ronda sobre Rob y Kristen más allá de la ficción. Ya son muchos los meses en los que no se ha dejado de especular sobre una posible historia de amor entre ambos, pero una vez más nos han dejado con la miel en los labios y no se han pronunciado al respecto de una relación que muchos aseguran que existe. Sin embargo, las imágenes de la pareja agarrada de la mano hace varios días en el aeropuerto Le Bourget poco antes de zarpar en un jet privado hacia Londres dejan poco lugar a dudas.
Robert Pattinson, pendiente de Kristen Stewart durante la presentacion de Luna Nueva
Robert Pattinson, con la imagen desaliñada a la que nos tiene acostumbrados, con barba de varios días, pantalones vaqueros y una camisa remangada, cautivó por su atractivo, pero sin duda por su simpatía al responder las preguntas. Acerca de su papel en Luna Nueva, el actor cuenta cómo se preparó tras el éxito de Crepúsculo: “Tuve bastante tiempo de descanso entre una película y otra. Mi papel es mucho más corto y no tenía tanta responsabilidad. Además Taylor se preparó muy bien para convertirse en hombre lobo. Ha sido relajado”, sonríe y añade, entre risas, “mi escena favorita es justo antes de que Bella y yo rompemos” Y matiza: “El motivo fue porque le dije al director que esa escena había que rodarla de otra manera. Se lo dije a Chris y accedió. Fue muy valiente por su parte”. Mientras que para Kristen curiosamente su escena favorita “fue el final. Lo que más me gustó es terminarla”, dijo, aunque precisó que fue básicamente por rodarla en Italia. “El clima me afecta mucho y en Vancouver el tiempo es muy variable. Estaba siempre temblando, que a la vez venía bien para el personaje. En Italia como no teníamos plató fueron cuatros días de continua tensión corriendo de una lado para otro, cuando acabamos me di cuenta realmente que estaba muy cansada. Me encantó el trabajo”.
'Mantener el miedo es complicado, He trabajado mucho el lado oscuro de Edward'
Coincidiendo con Pattinson, para Taylor Lautner su escena preferida tiene que ver con Kristen: “Mi escena preferida es cuando entro en la habitación de Bella después de haber estado enfadados. Es una escena muy dulce”. El más joven de los protagonistas, Taylor, de 17 años, admite que ha sido un trabajo muy duro, ha tenido que entrenar muchas horas para adquirir musculatura y convertirse en hombre lobo. “Yo creo que funcionaría igual la película si no fuésemos licántropo o vampiro. Es cosa del director que hace su magia”. Sin embargo, Pattinson tiene claro el ingrediente clave para hacer temblar a las jóvencitas de miedo o amor: "Mantener el miedo es complicado, pero he trabajado mucho el lado oscuro de Edward".
Los protagonistas de 'Luna Nueva' posan junto al director, Chris Weitz
En cuanto al fenómeno fan, con el que se encontrarán esta tarde en el Palacio de Vistalegre, Robert Pattinson admitió que es complicado asumirlo. “Es muy extraño cuando la fama te llega tan rápido. Al principio me halagaba, pero después todo explotó y me puse muy nervioso. Lo reconozco”. A medida que ha trascurrido el tiempo, Rob reconoce que ya ha encontrado la salida a todo este mundo: “Este fenómeno no es por mí, es por mi personaje. Cuanto más soy capaz de decirme que es a Edward a quien adoran más me divierto”.
Uno de los momentos más divertidos que se vivió en la rueda de prensa fue con la pregunta acerca de con qué directores españoles les gustaría trabajar. El más osado fue Pattinson, aunque quiso ser prudente y no equivocarse con ningún director mexicano, para finalmente responder Almodóvar. Pero no contento con la respuesta tan obvia, se acordó del título de otra película española El Orfanato, y concluyó aliviado: “Ya podré dormir tranquilo”.
