Muy acaramelados y dando muestras de su amor en la alfombra roja hemos visto una vez más a Adrien Brody y a Elsa Pataky. La pareja asistió este fin de semana a la inauguración del club Cathouse en el hotel casino Luxor de Las Vegas, que reunió a varios rostros conocidos como Kelly Osbourne o Tommy Lee, ex marido de Pamela Anderson. Parece que la pareja ha podido hacer un hueco en sus apretadas agendas para poder verse estas Navidades, ya que hace unas semanas la protagonista de Ninette todavía no sabía si podría estar con su chico en estas fechas.
A principios del mes de diciembre la actriz vino a España para presentar una colección de relojes de la que es imagen y allí nos sorprendió con su nuevo flequillo. En esta ocasión ha vuelto a cambiar de look, pero esta vez llevando su larga melena recogida, como si tuviese el pelo corto, y escondiendo su flequillo con un gorro negro de que no se desprendió en toda la noche, que combinó con un vestido plateado, unos tacones de vértigo y unos guantes largos al más puro estilo "Gilda". Adrien, por su parte, iba conjuntado con ella y también llevó una boina, pero de color gris.
A pesar de que a la pareja no le gusta hablar de su vida privada, la actriz más deseada de nuestro país no pudo evitar deshacerse en elogios hacia su novio. "Me fío de él totalmente", dijo.
La relación de Elsa y Adrien, -que comenzó hace casi dos años-, cada día se va consolidando más, aunque de momento ninguno de los dos quiere hablar de boda. "Este tema lo dejamos para nosotros", ha dicho la actriz en varias ocasiones. Ella vive en Los Ángeles con Adrien y poco a poco se va abriendo un hueco en Hollywood, donde en uno de sus próximos proyectos trabajará al lado de Andy García.
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