La actriz estadounidense Halle Berry ha descubierto su Estrella del Paseo de la Fama de Hollywood. La que fuera chica Bond recibió la distinción número 2.333 ubicada justo delante del Teatro Kodak de Los Ángeles. De este modo triunfal la actriz regresó al lugar que la vio triunfar cuando se alzó con la dorada estatuilla a la mejor actriz por Monster’s Ball. "Estoy tan emocionada", manifestó nada más llegar al citado paseo. "Tan pronto vi a la multitud de gente y amigos aquí he comenzado a llorar". Por aquel entonces ya se pronosticaba que Halle Berry tenía buena estrella. Un Emmy, un Globo de Oro, un Oscar y ahora una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood son algunos de los logros conseguidos en su carrera cinematográfica.
Su madre, su novio y Samuel L. Jackson Pero las lágrimas no sólo fueron las de Halle, su madre, Judith Ann Hawkins, no pudo contener la emoción al ver a su hija Berry recibir este cálido homenaje. Y tras limpiarse ambas las lágrimas celebraron abiertamente el honor de formar parte de la historia de Hollywood. A su vez, la bella estadounidense, espectacular a sus 40 años, estuvo acompañada por su novio, el modelo canadiense Gabriel Aubry y su gran amigo, el actor Samuel L. Jackson, un fan confeso de la actriz. Como es habitual, el alcalde honorario de Hollywood, Johnny Grant, pronunció su discurso y una vez concluidas sus palabras, la actriz no dudó en hacer otra cosa que agradecerle tan emotivo discurso con un cariñoso abrazo.
Su bella melena tiene los días contados Halle Berry, cuya película Seduciendo a un extraño será estrenada próximamente en España, se embarcará próximamente en un ambicioso proyecto en el que incluso tendrá que raparse el pelo al cero. Las exigencias del guión de Nappily Ever After obligarán a la actriz a raparse la cabeza. "Estoy muerta de miedo pero es lo que tengo que hacer", ha confesado la actriz, al tiempo que añade: "Pienso que quedarse calva puede ser una experiencia al mismo tiempo excitante". Su personaje, al igual que la bella actriz en la vida real, tendrá que enfrentarse a la nueva percepción que su entorno tiene de ella cuando empiece a perder el pelo.
