Amores y desamores en el 2005

Por hola.com

2005 ha sido un año de corazones alborotados. Prueba de ello son las parejas que se han formado, las que se han conformado y las que aparecen y desaparecen, sin poder saber a ciencia cierta dónde están sus corazones. Unas se confirman y pasan por el altar. Otras rompen y hallan una nueva media naranja en menos que dura un suspiro. Muchas caminan por la cuerda floja "del ni contigo ni sin ti" y algunas nos sorprenden porque se prolongan más allá del verano...

Bodas sorpresa y parejas sorpresivas
Lo han hecho Demi Moore y Sandra Bullock; a Jennifer Garner y Ben Affleck se les sorprendió, pero también buscaron la intimidad a la hora del "sí, quiero". Renee Zellweger vivió un romance relámpago con su cantante de country particular. Y dio el "sí", un "sí" con fecha de caducidad reducida. En la boda de Genoveva Casanova y Cayetano Martínez de Irujo la sorpresa se basó en la belleza de las invitadas y en la de la propia novia, que irradiaba felicidad. El altar tendrá que esperar unos meses, pero el amor está más que confirmado, en otras parejas que han hecho las delicias de los cazadores de chismes románticos. Ahí está Tom Cruise, que primero se iba a casar en México, y que luego dejó la boda en paréntesis con su princesa particular, la actriz Katie Holmes que espera su primer hijo. Ahí están Brad Pitt y Angelina Jolie, que no dicen pero van dando rienda suelta, poco a poco, sobre su posible visión de futuro. Y la despechada Jennifer Anniston (que anunció su separación del guapísimo Brad en enero de 2005) ya no lo es tanto, gracias al consuelo incondicional de Vince Vaugh. Pero para sorpresas, las que nos deparó el verano, las que coletean en el invierno. Ahí está Colate Vallejo-Nágera y Paulina Rubio; o Carmen Martínez-Bordíu junto a José Campos... y una de las parejas más seguidas, y envidiadas, de la temporada: Eugenia Martínez de Irujo y Gonzalo Miró, prueba fehaciente de que cuando dos se aman ni la edad ni las distancias son escollos insalvables. Mientras tanto, su ex esposo, Francisco Rivera Ordóñez ha buscado consuelo en los brazos de Blanca Martínez de Irujo, pero la confirmación definitiva del amor no llegó hasta los invernales días de diciembre.

Rupturas sin vuelta atrás
Muchas de las parejas antes enunciadas proceden de rupturas sin vuelta atrás. Y más... ¿Porque cómo hubiera surgido el amor entre David Bisbal y Elena Tablada si el cantante almeriense no hubiera anunciado su separación? ¿Y Chenoa cómo se hubiera encaminado hacia un nuevo amor, con el actor Álex González, si Bisbal no se hubiera apartado definitivamente de su corazón? Renée Zellweger encontró, en 2005, el amor y el desamor. Como también le ha ocurrido otro tanto, en un plazo algo mayor de tiempo pero no mucho más, la princesa del pop, Britney Spears, quien según las crónicas sociales de Hollywood, harta de las infidelidades y grandes fiestas de su amantísimo esposo, Kevin Federline, le ha plantado en las puertas de la casa. Ni el hijo común ha servido para apaciguar las iras de la cantante. Otra de las parejas rotas ha sido la de Paris Hilton con su prometido, Paris Latsis. Pero Paris Hilton no deja que las penas del corazón le duren mucho tiempo, y pronto encontró otro millonario, en este caso Stavros Niarchos. Más serena, y respetuosa, ha sido la ruptura de Jaydy Mitchell y Alejandro Sanz quienes, por cariño a su hija Manuela, han querido finalizar su relación desde la cordialidad.

La sombra de la infidelidad
Entre tanto amor sereno -como el protagonizado, a pesar del alboroto de la boda entre Fonsi Nieto y Ariadne Artiles; o Doda Miranda y Athina Onnassis-, y tanto amor alocado -sin ir más lejos, la extraordinaria "no boda" entre Ronaldo y Daniella Cicarelli,- se esconden historias de "ni contigo ni sin ti". Una cadeneta de infidelidades en la que se lleva la palma, sin lugar a dudas, Jude Law, a quien se sorprendió en actitud más que cariñosa con la niñera de sus hijos (y los de Sadie Frost, su ex mujer y, al decir de muchos quien ideó el plan para sorprender a Jude Law en una infidelidad a su amantísima Sienna Miller. Y nunca se sabe, si Sienna le ha perdonado o no... En la cuerda floja de la infidelidad. En conclusión, un año lleno de corazón querido y corazón despechado.