Charlize y Gwyneth, la belleza llega a Toronto

Por hola.com

La llegada de Charlize Theron y de Gwyneth Paltrow al festival de cine de Toronto ha llenado de belleza y glamour la presente edición del certamen. La primera, ganadora del Oscar a la mejor actriz por Monster presentaba su nuevo trabajo, North Country, dirigida por el neozelandés Niké Caro, y basada en la historia del caso más grave de acoso sexual acaecido en Estados Unidos. Otro filme en el que la actriz, una de las más bellas del momento, convierte su privilegiado físico en algo irrelevante: "Después de Monster -afirmó - cuando les hablé a mis amigos de esta historia, algunos me dijeron: ¡Vaya, otra película de fea!. Cuando consigues entender la carga emocional de un personaje, los elementos físicos surgen por sí mismos casi de forma orgánica". Y es que la sexy Charlize Theron se gusta poco o nada cuando se mira en el espejo. Según un tabloide estadounidense, la actriz, que planea su boda con Suart Towsend, ha confesado que de niña nada tenía que ver con cómo es ahora -"no era la típica niña adorable"- y que rara vez se ve tan bella como la señalan las revistas: ""Algunos días me miro al espejo y me siento sexy. Otros me digo que estoy gorda y que necesito jeans más grandes".

Por su parte, Gwyneth Paltrow, premiada por la Academia de Hollywood gracias a su papel en Shakespeare enamorado llegó a Toronto (recordemos que tenía previsto acudir a Venecia y no pudo ser por un fallo técnico del avión en el que viajaba) para promocionar Proof, basada en la obra del premio Pulitzer David Auburn, , y dirigida por John Madden, en la que interpreta (ya lo había hecho en el teatro) a la hija de un importante matemático que parece haber heredado los problemas mentales de su progenitor. Durante la rueda de prensa, los periodistas interrogaron a la actriz sobre cómo había influido en ella la pérdida real de su padre, fallecido en 2002, entre su abandono de los escenarios y el inicio del rodaje del filme: "Es probable que de algún modo si me influyera. Sin embargo, yo no suelo trasladar mis emociones de la vida real a mi trabajo profesional. Pero, desde luego, me encontraba en una situación paralela a la de Catherine, mi personaje. Sinceramente, no sé hasta que punto cambié mi interpretación por ello".