A punto de cumplir 70 años -el lunes 20 de septiembre- Sofía Loren se mostró igual de bella y sonriente que siempre en la boda de su hijo mayor, Carlo Ponti Jr., que es director de orquesta, con la violinista húngara Andrea Meszaros. La actriz fue la madrina de la ceremonia celebrada en la basílica de San Esteban de Budapest, la catedral más grande de la capital de Hungría.
El novio, de 36 años, entró en la iglesia flanqueado por sus padres, la actriz y el productor Carlo Ponti, de 92 años. Minutos después llegaba la novia con un vestido de corte romántico, escote palabra de honor y un sobrevestido de encaje, diseño de Giorgio Armani. El modisto italiano, que asistió a la boda, fue el encargado de diseñar además el traje del novio, en color gris con chaleco a juego, el de su padre, también en tono gris con ralla diplomática, y el de Sofía, un traje pantalón color morado claro.
Joyas de Damiani La actriz italiana completaba su atuendo con un collar de perlas de Damiani, que firmaba además las alianzas de los novios. Una vez concluída la ceremonia, que se celebró por el rito católico y luterano, los 80 invitados se trasladaron a la Academia Nacional de las Ciencias, donde se celebró el banquete. En principio, la cena iba a servirse en el palacio Grassalkovich, una de las residencias favoritas de la emperatriz Sissi en el país, aunque finalmente se celebró en la Academia, un edificio del siglo XIX situado al borde del Danubio. Tras la fiesta, Sofía Loren y su marido, Carlo Ponti, volvieron al hotel Four Seasons de Budapest, donde se alojaron durante estos días.
