Pedro Almodóvar se hizo querer por la prensa, que le recibió en el Circula de Bellas Artes con gritos de ¡Bravo! y posó para los fotógrafos durante más de 20 minutos con beso incluido al Oscar, la preciada estatuilla que consiguió el pasado domingo por Hable con ella. Junto al director manchego, su hermano, Agustín, y las actrices, Leonor Watling, que le acompañó durante la gala celebrada en el Kodak Theatre, y Rosario Flores, que no pudo viajar a Hollywood porque se encontraba de promoción en Puerto Rico.
Almodóvar compartió su alegría y felicidad con los cientos de periodistas acreditados para la rueda de prensa que dio el viernes por la tarde en Madrid, e incluso dejó que tocaran su Oscar, el segundo de su carrera.
Hubo tiempo para todo. Para comentar quienes eran las mejor y peor vestidas de la gala, para contar con detalla sus recuerdos del backstage, donde coincidió con Adrian Brody, del que asegura no se le quitó la cara de estupor y sorpresa durante toda la noche (el actor consiguió el galardón al mejor actor por El pianista, de Roman Polanski), y con Nicole Kidman, de quien dijo estaba muy nerviosa y para desmentir que hubiera censurado su discurso, tal y como había apuntado algún diario.
‘Dije lo que quería, pero 45 segundos dan para muy poco’ comentó el director. No obstante Pedro Almodóvar confesó que hubo mucha tensión y miedo, antes y durante la gala. ‘Cuando eres extranjero es más fácil, pero yo creo que había a las represalias entre los actores norteamericanos. Quizás por ello, los extranjeros, que éramos los que menos teníamos que perder, fuimos los que alzamos nuestra voz contra la guerra’.
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