Para meterse en la piel de Virginia Woolf, interpretación que se ha convertido en su mejor pasaporte para los Oscar este año- Nicole Kidman no dudó en someterse a un drástico cambio de imagen que incluyó la utilización de una prótesis que agrandaba considerablemente su nariz. Esta no era la primera vez que la actriz ponía su look al servicio de un personaje, pero sí el más radical, ya que su natural belleza queda absolutamente cegada en la película.
Pero Nicole Kidman, que atraviesa un excelente momento profesional y se ha convertido en una de las actrices más solicitadas de los últimos tiempos, es una de esas intérpretes camaleónicas que van ganando presencia con el paso del tiempo y que no dudan en transformar su aspecto cuando el guión lo requiere. En las imágenes que les ofrecemos se pueden comprobar algunos de los cambios a los que nos referimos, desde su melena negra en Birthday Girl, su aspecto sofisticado en Moulin Rouge o la imagen que lucirá en las dos películas que se estrenarán próximamente, Cold Mountain y The Human Stain.
