Cuando en ocasiones me preguntan cuáles son los rasgos que, a mi modo de ver, definen mi personalidad, suelo responder que soy una persona muy vehemente, muy apasionada y a la que le encanta la aventura. Dicho de otra manera, soy un hombre al que le gusta con pasión la vida. Tengo, por otra parte, un temperamento muy fuerte que, sin embargo, no me dura más allá de cinco minutos. En otro orden de cosas, me gusta mucho la amistad y, en consecuencia, soy muy amigo de mis amigos. Y me gusta mucho la familia. Diré, por otra parte, que soy un auténtico enamorado de mi tierra, aunque al mismo tiempo me considero ciudadano del mundo".
Así comienza Antonio Banderas, el más internacional de los actores españoles, el primero de los tres capítulos de sus memorias que ¡Hola! les ofrecerá a lo largo de las próximas semanas, unos recuerdos llenos de anécdotas familiares, de sueños hechos realidad y de esperanzas. Les ofrecemos a continuación algunos de los fragmentos de lo que podrán leer esta semana. "Mi madre ha sido mucho más vitalistas que mi padre, más pendenciera, en el buen sentido de la palabra, una luchadora nata", "Un día, mi padre se compró un dos caballos e íbamos en él por toda España. Conocimos todo el país y todas las catedrales".
Es, en definitiva, la memoria viva de un hombre que ha triunfado en lo profesional y en lo personal, la historia de su infancia, de su juventud, de sus primeros pasos en el mundo de la interpretación y de su posterior salto a Hollywood, la historia del Antonio hombre, del Antonio actor y, por encima de todo, del Antonio padre, esposo y amigo de sus amigos.
La próxima semana, en el capítulo II, Antonio Banderas habla de su boda con Ana Leza, de cómo fue su llegada a Hollywood, y de su encuentro con Melanie Griffith, la mujer a la que admiraba antes de amarla.