-No fue fácil, fue una aventura. Ocho meses de llamar y llamar, e insistir. Estoy muy contenta con el resultado, es un disco que yo compraría, lo escucho una y otra vez y no me canso. Es muy especial, me encanta la mezcla...
¿Cómo surgió la idea?
-Creo que la idea se la propuso Melanie a Nacho, tuvimos una conversación con la gente de Universal, que decidieron ayudarnos desde el principio, y decidimos intentarlo sin saber qué iba a pasar. ¡Somos los primeros sorprendidos de tener este disco ya terminado!.
¿Después de la fiesta celebrada en casa de Antonio y Melanie, han colaborado las estrellas de Hollywood? ¿Habéis conseguido que se conciencien?
-Antonio y Melanie han abierto las puertas de su casa, Han tenido a quince niñas quedándose allí, ha sido una invasión total de su casa desde un mes antes de la fiesta, y han sido muy generosos con nosotros, con la fundación. Ahora mismo ellos son parte de la fundación.
Pero, por ejemplo ¿Cindy Crawford y el resto colaboran?
-Colaboraron ese día. Por estar allí el vestido se vendió por una cantidad...Todo eso es ayudar.
Estás involucrada desde el principio en Sabera, ¿Cuál es tu papel en la fundación?
-Soy Presidenta Honorífica de los Estados Unidos. Y mi papel es un poco estar ahí para lo que necesiten. Estoy en contacto directo con ellos, con la oficina de Madrid, con Calcuta, y con Estados Unidos, donde ahora estamos montando la oficina. El contacto es diario porque está creciendo mucho y muy rápido. Ahora mismo tenemos a UNICEF ayudándonos. Está haciendo un análisis de la situación, de todo lo que se ha hecho hasta ahora y de cómo se ha hecho, para poder asesorarnos. Sabera firmó un acuerdo con UNICEF en 1998 y es algo que tenemos ahí.
¿Se ha convertido quizá en algo demasiado grande?
No, crecer es algo muy bueno, pero ahora mismo nos viene muy bien tener a alguien ahí, muy cerca, para que los siguientes pasos se den bien. Es mucha responsabilidad sacar a esas niñas de la calle. Eso no tiene vuelta atrás.
¿Cómo fue tu primer contacto con Calcuta
Ir a Calcuta me cambió la vida. Allí no hay tiempo para tonterías, vas a trabajar. Y así es como yo descubrí esa ciudad, trabajando donde la madre Teresa me mandó. Ese viaje me lo descolocó todo, me hizo dudar...¿qué pasa cuando has visto lo que ocurre allí con tus propios ojos, cuando has visto mujeres tiradas en la calle? Cuando ves con tus propios ojos una niña con mordeduras de ratas, leprosos...,y te das cuenta de que nadie se para porque los otros están igual de mal, te lo planteas todo. Yo tuve muchas dudas, no sabía como volver y seguir teniendo una vida tan privilegiada como la que tengo, un trabajo, una casa, un plato de comida en la mesa todos los días...
Para mí fue un choque tan fuerte que necesité preguntarle a la madre Teresa: ¿Qué se hace cuando has visto esto?". Ella me contestó que no tenía que cambiar mi vida ni mi trabajo, que tenía la suerte de tener un trabajo que podría utilizar para mostrar lo que sucedía en la India a todas las personas que no habían estado allí".
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