Aunque coincidieron poco durante la grabación, la química que desprende la pareja en varias escenas despertó las especulaciones sobre la posibilidad de que existiese entre ellos algo más que una simple amistad, relación que fue desmentida por el propio David en un programa de televisión:"Son cosas que me sorprenden mucho. No he roto con Chenoa porque no se puede romper algo que no existe. ¿Cómo voy a estar con alguien si no tengo tiempo ni para llamar a la familia?. El día que tenga novia lo diré" y añadía respecto a su amistad con Mónica Cruz: "No hay nada de nada. La gente te relaciona con personas de tu entorno, del trabajo, pero que se le va a hacer, me río y ya está".
BAILARINA Y ACTRIZ Su papel de la introvertida y perfeccionista Silvia en una de las series revelación de la temporada pasada, ‘Un paso adelante’, que como decíamos ha regresado con éxito, dieron a conocer su rostro al gran público, un rostro que, por otra parte, se asocia inmediatamente al de su hermana Penélope. Físicos parecidos pero cualidades y defectos diferentes, caracteres propios y carreras independientes. Mónica, que sin duda y como ha dejado claro en más de una ocasión siente una profunda admiración por la protagonista de ‘Vanilla Sky’, reivindica que se la reconozca por su trabajo y no por ser la ‘hermana de..’. Y ese reconocimiento que busca se lo está ganando a pulso y por derecho propio. A sus 25 años, esta joven de larga melena morena y profundos ojos oscuros, tiene a sus espaldadas un bagaje profesional importante en el mundo de la danza. Formada junto a los más prestigiosos profesores desde que tan sólo tenía cuatro años, Mónica trabajó en la compañía de Joaquín Cortés durante siete años, representando ‘Pasión Gitana’ por escenarios de todo el mundo.
Ahora pisa con fuerza en el mundo de la interpretación y se ha hablado de la posibilidad de que su debut en la gran pantalla sea de la mano de Patrick Swayze en ‘Camino flamenco’ una historia de amor en la que Mónica interpretaría a una profesora de flamenco.
