Billy Wilder: Muere el último gran maestro del cine

Por hola.com

Nació en tierras del Imperio Austro-Húnagro, pero ha sido EE UU, el país que le llevó a lo más alto de su carrera y le concedió 5 Oscar, donde Billy Wilder reposará para siempre. A sus 95 años, el director y guionistas de películas tan aplaudidas y admiradas como Irma la dulce, El crepúsculo de los dioses, El apartamento o Con faldas y a lo loco ha fallecido de una neumonía en su casa de Beverly Hills, en los Ángeles.

No quiso morir antes
Wilder sufría problemas respiratorios desde hacía algún tiempo, aunque mantenía un aspecto envidiable para su edad. Le gustaba la buena vida, siempre llevada con discreción, y era un trabajador incansable. Un ser que no dejó jamás de ordenar sus papeles ni de explorar en su mente en busca de un nuevo guión para retratar como, siempre había hecho el lado oscuro y cómico, de la humanidad...

Las obras más célebres del cine
Mago de la comedia, Wilder dirigió alguna de las obras más célebres del cine: Primera Plana, La tentación vive arriba, Con faldas y a lo loco, Sabrina, En bandeja de plata y fue uno de los cineastas más premiados. Recibió tres Oscar por Días sin huella (1945), como mejor película guión y dirección; y dos más con el Crepúsculo de los Dioses y El apartamento.

Estuvo casado con Judith Coppicus (1936) durante diez años y tuvo con ella dos hijos: Victoria y Vincent (mellizos), aunque éste último murió nada más nacer; volvió a contraer matrimonio con Audrey Joung Willer (1949).

Wilder se había convertido hace ya tiempo en abuelo y seguía siendo, un enamorado de la gran pantalla y de las grandes historias que ya no podrá contar. Por eso, no quiso morir sin ver como antes se le hacía justicia al cine negro y se le entregaba un Oscar a un actor de color. Que, en este caso y para su buen sabor de boca, fueron dos: Denzel Washington y Halle Berry.