Para peinarlo es muy sencillo. Lo ideal es usar siempre un peine redondo y un secador para añadir volumen a la zona del flequillo y los pómulos. Da igual que lo tengas rizado, o liso, la clave es que esta zona adquiera protagonismo. Para fijar el peinado, puedes utilizar un bálsamo o un fijador, pero que no apelmacen el pelo.