Aunque pueda parecer sorprendente, sigue la polémica en torno al cabello del canciller alemán Gerhard Schröder. Hace unas semanas saltó la noticia de que el político alemán había demandado a una agencia que afirmó que se teñía el pelo. Ahora, ha llegado la hora del juicio y el canciller ha defendido ante el juez el color de su cabello. Una corte de Hamburgo tiene que decidir si la agencia de noticias alemana DDP, que difundió la noticia de que el color negro de su pelo se debía a un tinte, debe pagar una sanción por haber propagado este tema.
Pese a que la agencia de noticias ya pidió disculpas al canciller, Schröder no dudó en llevar el asunto hasta el final, Gerhard Schroder demanda a una agencia de noticias. Y es que lo considera una cuestión de principios. Por eso, el coqueto mandatario y sus dos peluqueros siguen sosteniendo que el color castaño de su cabello es auténtico y que no ha recurrido a ningún tinte para ocultar sus canas. La polémica está servida y el juez decidirá sobre este asunto que en Alemania se ha convertido, casi, en una cuestión de Estado.
