Muchas cosas han cambiado en la vida de Penélope Cruz en los últimos meses. Hoy, es una de las intérpretes del momento, y la expectación que levanta en cada estreno es enorme. A raíz de su romance con el atractivo Tom Cruise, su presencia en los medios es aún mayor. Además, ahora, la bella Penélope tiene que aparecer impecable en cada acto público, creando poco a poco un estilo que cautive. Así, cada estreno se convierte en una pasarela en la que Penélope Cruz deslumbra con su belleza.
Además de lucir hermosos trajes de la firma Ralph Lauren (de la que la actriz es imagen), Penélope cuida mucho el look de su cabello y ha deleitado a propios y extraños en las numerosas presentaciones de sus últimos trabajos con una amplia colección de recogidos. Éstos son, sin duda, su arma favorita y más seductora para acudir a estos importantes actos.
Elige moños sencillos Aunque la actriz prefiere el pelo suelto o recogido en una sencilla coleta para el día a día, para los grandes acontecimientos apuesta por el moño, y tiene dos claras preferencias: un sencillo moño bajo, con el pelo totalmente peinado hacia atrás, tirante, engominado y luciendo raya en medio (aunque también la ha llevado a un lado); y un moño igualmente bajo, pero que cambia en su aspecto delantero, quedando el pelo más ondulado y con algunos mechones sueltos, que dan un aire menos sofisticado al peinado.
El primero, que deja el rostro al descubierto, es mucho más sobrio y admite menos variantes: la raya al centro o bien a un lado y el pelo totalmente hacia atrás o cayendo ligeramente hacia un lado. El segundo es, curiosamente, el que ha elegido la actriz para dos de sus últimas presentaciones en España (la última en el estreno de Vanilla Sky en Madrid). Penélope no renuncia además ni al flequillo (luce algunos graciosos mechones sueltos en algunos de sus recogidos) ni a los adornos en su cabello: destacó por ejemplo la flor blanca, a juego con el vestido, que eligió para acudir a la presentación de La mandolina del capitán Corelli.
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