Locas por el (falso) pelo sucio

Por hola.com

Por extraño que parezca, mujeres de tan indudable glamour como Jennifer Aniston, Kate Moss o Liz Hurley están haciendo algo en apariencia tan extraño como pasarse horas en manos de sus peluqueros para conseguir un efecto algo… sucio. Sí, como suena. Claro está que en vez de calificarse de forma tan poco atractiva, al pelo más de moda se le llama "texturizado", es decir, de aspecto definido, en que cada mechón se hace visible por sí mismo, separándose entre sí para tomar un aspecto ligeramente rugoso, algo revuelto.

En el caso del pelo liso, esta tendencia se traduce en puntas muy rectas, casi agresivas, que se separan en forma de "cumbres" invertidas, sin formar una línea de corte continua, sino algo rota y desgajada. Cuando se habla de rizos, se busca marcar cada onda y destacar bucles individuales y cerrados.

En contra de lo que pudiera parecer, este efecto no se consigue arrinconando el champú más de lo necesario, sino aplicando productos tales como ceras, geles de definición o serums que dan este aspecto algo tosco al cabello, pero siempre tras lavarlo y con el pelo ya bien limpio.

Dado que estos productos suelen estar muy concentrados, es importante utilizar muy poco producto y calentarlo entre las palmas de las manos, comenzando su aplicación siempre por las puntas y sin tocar nunca la raíz del cabello para no engrasarlo, ya que lo importante es destacar el efecto en los largos, no en lo alto de la cabeza.