La "impaciencia cosmética" es el nombre que le dan los expertos a la frustración que sienten algunas mujeres si no notan resultados instantáneos tras probar un producto:  "Es la sensación de que los productos de belleza no funcionan, un error que puede llevar a cambiar constantemente de régimen cosmético y que derivará en una piel estresada", explica Elisabeth San Gregorio. 

"Como norma general, conviene probar los productos durante lo que denominamos como período de regeneración celular, y que está en torno a 35 días de media", avisa Estefanía Nieto sobre el tiempo que se debe esperar para que un cosmético consiga demostrar sus capacidades. 

Eso sí, la especialista puntualiza: "Esto variará según la edad, ya que personas de más de 50 años suelen tardar una o dos semanas más. Del mismo modo, dependerá de cada principio activo en concreto".