En lugar de planear el día alrededor del entrenamiento, es el entrenamiento el que debe adaptarse al horario de cada persona: “Si es lunes, estás súper cansada y solo puedes encajar una sesión de 20 o 30 minutos, hazlo. Si el martes te sientes fresca puedes ir un poco más allá y hacer una sesión de 75 minutos”, explican los hermanos.