Aunque no todas las frutas ayudan a adelgazar, la piña es una de las más apreciadas por las celebrities para mantener la línea y perder peso en tiempo récord. Sus propiedades depurativas y saciantes la convierten en un alimento indispensable en las dietas de adelgazamiento. Se puede comer partida en rodajas, ideal para el postre, o licuada, la forma preferida de modelos como Devon Windsor o Alessandra Ambrosio para tomar en verano. Sin embargo, si al comer piña desechas la cáscara, estarás perdiendo una gran oportunidad para perder peso. Como revela Boutique Gym, según un estudio llevado a cabo por el Journal of Agricultural and Food Chemistry de los Estados Unidos, la cáscara contiene fibra y polifenoles que contribuyen a perder peso de una forma más eficaz. Seguramente te preguntes cómo se puede comer sin rasparte la lengua o notar su amargor. Pues bien, la respuesta se encuentra en una receta sencilla, exquisita y fácil de elaborar.

Se trata de un té diurético que calmará tu ansiedad y te ayudará a bajar de peso, ya que, como se ha descrito anteriormente, contiene fibra y polifenoles. La fibra incitará a tener sensación de saciedad y los polifenoles, por su parte, ayudarán a depurar el organismo. Sólo necesitarás la cáscara de media piña, medio litro de agua y una rajita de canela. Lo primero que hay que hacer es hervir el agua con las cáscaras de piña junto a la canela durante 30 minutos y después, dejarlo enfriar. Cuela la mezcla y bébelo a lo largo del día.

El fruto de la piña tiene un alto contenido en agua y fibra, lo cual ayuda a eliminar las toxinas acumuladas en el organismo que dificultan la digestión y favorecen la retención de líquidos. Sin embargo la cáscara, además de saciar y depurar el organismo, también facilita la digestión y ayuda a disminuir los niveles de colesterol. Además, es diurética, lo cual ayuda a controlar la retención de líquidos y la grasa corporal. Por otro lado, es un excelente antiinflamatorio debido a sus enzimas y antioxidantes, y ayuda a estimular el sistema inmunológico. Por si fuera poco, disminuye el estrés, el dolor en las articulaciones y la artritis.

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