De tobillos para abajo

Para pedicuras de emergencia sin salir de casa, aquí va un sencillo paso a paso. ¿Lista para lucir sandalias sin reparo?

Por hola.com
  • El primer paso es eliminar el maquillaje de las uñas con quitaesmalte. Los bastoncitos de algodón son una gran herramienta para eliminar los restos más difíciles de los bordes.
  • Sumergir los pies en un baño enriquecido con sales de pedicura o incluso un simple chorrito de gel ablanda las durezas y desodoriza.
  • Es el momento de usar un exfoliante de pies, incidiendo en las zonas de mayor roce y rugosidad, como tobillos, planta o dedo pequeño. Hay que ser insistente.
  • Ni durezas ni callos deben cortarse nunca, a no ser que lo realice un podólogo experimentado.
  • Tras el baño, y con los pies muy secos, se puede usar una lima de pies para las plantas, especialmente el talón. Algunos profesionales prefieren usarlo antes del pediluvio.
  • Con el pie seco, se aplica gel quitacutículas alrededor de la uña y se empujan éstas hacia atrás con suavidad.
  • Los pies se deben hidratar con crema, pero sin extenderla todavía sobre los dedos para no manchar las uñas. Si tuvieran restos de grasa, el esmalte no se adheriría.
  • Es imprescindible usar base y dos capas de esmalte, siempre en capas muy finas que deben secarse bien entre cada aplicación.
  • Una triquiñuela para chicas con prisa: si se llevan sandalias abiertas, el esmalte se puede aplicar una vez calzada y evitarse ese momento de alto riesgo en que aún no está del todo seco.