Todo lo que debes saber de la alopecia

Conocer los tipos de caída del cabello y las diferentes formas de enfrentarse a ella es vital para solucionar el problema.

Por hola.com

No todas las caídas son iguales, de hecho se distinguen dos grandes tipos de caída. Por un lado, las llamadas caídas reaccionales, que son repentinas y difusas, pues se pierde el pelo de toda la cabellera por igual. Se deben a factores como el estrés; el maltrato capilar (coletas muy tirantes, tintes o permanentes agresivos, abuso de secador); malnutrición; enfermedades o infecciones o cambios estacionales.
Por otro lado están las caídas de origen hormonal, que es la más frecuente en los hombres y que también puede darse en mujeres, especialmente en aquellas con un nivel de andrógenos alto. En estos casos, lo mejor es solucionar el problema de base con el médico de cabecera.

MÁS VALE PREVENIR
Mantener las buenas costumbres ayuda a mantener una cabellera sana.

  • El masaje capilar, realizado en la raíz del cabello, tiene un efecto vasodilatador y energizante del bulbo piloso. Lo oxigena y permite que le lleguen mejor los nutrientes, lo que favorece la salud del pelo.
  • Los complementos orales, tomados con regularidad, aportan los nutrientes más idóneos para su crecimiento y fortalecimiento, actuando en la raíz y nutriéndolo desde el interior.
  • Los productos anticaída no deben usarse de forma constante, sino en periodos determinados de mayor riesgo de caída, como en los cambios de estación o tras un régimen alimenticio.

    ¡NO TE ASUSTES! ES NORMAL PERDER PELO...
  • Si son de 50 a 100 cabellos diarios. El cabello nace, crece y muere. Y lo hace de forma individual y por separado en cada folículo, que se va renovando de forma natural. Por eso cada día se nos caen algunos cabellos, que están siendo reemplazados por otros nuevos.
  • Después de un régimen muy severo. Las dietas hipocalóricas de menos de 1.200 calorías pueden provocar la caída, más aún si son muy bruscas. Para evitarlo, se pueden tomar complementos orales anticaída durante y después de la dieta.
  • Tras periodos de estrés. Lo más curioso es que la pérdida de cabello no se produce durante los momentos difíciles, sino una vez que se reestablece la normalidad. Si la situación de angustia no se mantiene, el pelo vuelve a crecer.
  • A medida que cumplimos años. Los bebes nacen con una media de 1.100 folículos pilosos por centímetro cuadrado, cantidad que a los 25 años se ha reducido a unos 600 folículos aproximadamente. A los 50, tenemos casi la mitad, una reducción especialmente notable en las mujeres tras la menopausia.
  • Tras dar a luz. Durante los meses de gestación, el proceso de normal de caída del pelo se interrumpe, lo que conduce a una melena más abundante. Pero tras el parto todo ese cabello que se debía haber caído durante los nueves meses anteriores y que había quedado "retenido" empieza a caerse casi a la vez. Puede asustar un poco, pero es totalmente normal.
  • En los cambios de estación. No se sabe la razón biológica, pero está constatado que en primavera y otoño, los humanos tendemos a perder más pelo, como si "renováramos" nuestro manto piloso.

    Complementos fortalecedores: ¿sirven para algo?
    Son muy útiles, pero que nadie espere soluciones inmediatas: los complementos alimentarios para fortalecer el cabello actúan sobre la raíz, por lo que se tarda entre dos y tres meses en ver los resultados en el tallo, la parte que está en el exterior. Mejor nutrido, el cabello se fortalece, creando una cabellera de aspecto más vigoroso. Eso sí, conviene ser constante para mantener los resultados.

    ¡AUXILIO, ME SALEN CALVAS!
    Cada vez es más frecuente la aparición de alopecia areata, placas totalmente redondas de calvicie que pueden ser pequeñitas como una moneda o cubrir grandes áreas y afectar casi toda la cabeza. Los médicos desconocen su origen exacto, pero se sabe que están directamente relacionadas con el estrés. Si éste es puntual, el remedio son complementos orales y tónicos anticaída para potenciar la regeneración del cabello, así como técnicas de relajación. En caso de que el problema sea tener una personalidad que tiende al estrés o que maneja mal la vida diaria, cronificando esa angustia, puede considerarse la posibilidad de terapia psicológica para poder enfrentarse mejor a las tensiones. TERAPIA GENÉTICA
    Recientemente, la ciencia médica ha dado un paso de gigante para combatir la calvicie al descubrir y aislar el llamado gen Hairless (literalmente, sin pelo), cuyas mutaciones causan la alopecia universal, la más grave pues implica la pérdida del pelo, cejas y pestañas y hasta el vello. Activando ese gen, se ha conseguido regenerar los folículos pilosos y que volviera a crecer el pelo. Claro que todo esto ha pasado por ahora sólo en ratones, y aún quedan unos años para que estos descubrimientos se puedan aplicar a los humanos.