¿Imprevistos? ¡No, gracias!

Le proponemos sencillos remedios para solucionar cinco incidentes de última hora

Por hola.com

Una cita importante, una cena de ensueño o un día muy especial. Ocasiones, en definitiva, en las que le gustaría estar resplandeciente, pero no siempre es posible por culpa de inoportunos imprevistos que pueden poner un borrón en nuestro look. Le damos sencillos trucos para poner solución a estos problemas de última hora.

Inoportunos granitos
Tienes una cita ineludible y, como no podía ser de otra manera, aparece uno de esos granos inoportunos en un lugar preferente de su cara. Piensa, "¿pero por qué me tiene que pasar a mí?" Que no cunda el pánico: lo primero es intentar no tocarlo con las uñas, pues será peor el remedio que le enfermedad. Opte por camuflarlo con corrector de ojeras, eso sí, algo más claro que el tono de su piel. Luego, sólo queda maquillarse como suele hacerlo a menudo, sin olvidar la base de maquillaje.

Grandes ojeras
Para disimularlas, lo mejor es usar corrector de ojeras. Si no está acostumbrada a su uso, puede comenzar aplicando un poco de base de maquillaje en un tono claro en torno a los ojos, que ofrece un resultado más discreto, pero es más fácil de aplicar. Si prefiere algo que proporcione más cobertura, recurra al corrector. Recuerde que las fórmulas ligeras, más líquidas, son más fáciles de extender que las más cremosas o en barra.

Para aplicar bien el corrector, debe comenzar preparando la piel aplicando antes la hidratante del contorno. Sea parca, incluso tacaña, y utilice poco producto. No intente tapar la ojera por completo y a toda costa. Por mucho que se empeñe, nunca logrará borrar del todo su tono algo azulado. La meta del quitaojeras es dar luz a la mirada, no hacer milagros. Extienda el corrector mediante suaves golpecitos, sin arrastrar ni estirar la piel. Es fundamental que se funda con su tez.