Cuidados rejuvenecedores para unas manos ‘diez’

¿Cómo devolverles su frescura?, ¿qué hacer para protegerlas frente a los ‘enemigos’ externos?, ¿cómo conseguir que las manchas vayan desapareciendo?...

Por hola.com

Lograr que la piel de las manos permanezca joven y bonita no siempre es fácil: por un lado, es una de las zonas más desprotegidas del cuerpo (por lo que a menudo se ve expuesta a todo tipo de agresiones externas como el frío, el viento, el sol...) y, por otro, se trata de una piel muy pobre en grasa, fina y frágil, lo que hace que se convierta en una de las primeras en mostrar las señales del paso del tiempo.

Pero ¡no hay que desanimarse! Con la puesta en práctica de algunos cuidados básicos conseguirá que sus manos luzcan más frescas, jóvenes y bonitas que nunca:

La hidratación, imprescindible

Como decimos, la manos apenas tienen glándulas sebáceas, con lo que carecen de la protección natural que proporciona la grasa. De ahí la gran importancia de hidratarlas diariamente. Para ello, el mercado ofrece hoy día una gran variedad de cremas especialmente diseñadas para esta zona del cuerpo, desde las más espesas hasta las más ligeras, o aquéllas que cuentan con factor de protección solar.

Un truco casero para unas manos muy secas consiste en, cada noche antes de acostarse, aplicar una generosísima capa de crema y, después, ponerse unos guantes de algodón para dormir. A la mañana siguiente se verán mucho más suaves e hidratadas.

Zonas oscuras

Cuando comienzan a aparecer, se pueden empezar a tratar con cremas despigmentantes. No hay que engañarse y pensar que estas zonas oscuras desaparecerán por completo pero lo cierto es que sí se conseguirá una mejora del tono y un aspecto más suavizado.

Manchitas en el dorso de la mano

El gran inconveniente para eliminarlas es que, dado que esta piel es muy fina y delicada, no se pueden hacer peelings demasiado profundos puesto que el tejido se dañaría. Una opción en este sentido son los peelings medios que mejoran los problemas de pigmentación y proporcionan un aspecto más ‘jugoso’ a las manos. Eso sí, es importante ir ‘despacito y con buena letra’ con estos tratamientos: es preferible repetir unas sesión antes de correr el riesgo de quemar el tejido.

Exceso de sudoración

Si éste es su problema, no por ello deberá dejar de hidratar las manos. La solución es optar por fórmulas más ligeras. Además, recuerde que en las farmacias existen antitranspirantes específicos para esta zona del cuerpo.