Las mujeres de Tahití, Hawai e Indonesia conocen las ventajas de ciertas plantas desde hace generaciones y saben cómo utilizarlas para mantener la piel, el cabello y el cuerpo en perfecto estado. Aquí están algunas recetas caseras y unas líneas de cosméticos que les ayudarán a conseguir unos resultados óptimos.
Uno de esos ejemplos es el coco. De hecho, se dice que para los hindúes, el coco es la ofrenda más pura, y los habitantes de la paradisíaca Isla Mauricio lo utilizan a diario. ¿Su secreto? Su carne blanca, que no sólo es deliciosa, sino que también destaca por sus propiedades exfoliantes e hidratantes.
Si se deja secar al sol, se obtiene de ella un aceite que se utiliza para los masajes y da brillo al cabello, de excelentes propiedades emolientes. Pero no sólo se usa su carne: también se aprovecha su leche, que sirve como champú y de base para numerosos preparados suavizantes.
Receta casera. En reflexología podal, el aceite de coco se aplica en pequeñas gotas en el talón y la planta del pie y se masajea con el dedo gordo presionando para realizar pequeños círculos. Finalmente, se acaba pinzando y estirando cada dedo del pie con el pulgar y el índice.
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