El chocolate: el agente antiedad más goloso

Su uso cosmético cada vez está más extendido, debido a su alto contenido en antioxidantes

Por hola.com

Untuoso, sensual, dulce, acariciante… El chocolate despierta auténticas pasiones, una locura de amor que a veces roza la adicción. Sus usos gastronómicos son más que conocidos, sea en platos principales (como sucede en el mole mexicano) o en todo tipo de postres. Mas novedoso es su uso cosmético, que se extiende cada vez más, incluidos varios spa's (por ejemplo el Spa Hotel Hershey en Pennsylvania) que ofrecen curiosos (y golosos) tratamientos a base de este preciado manjar.

Una de las principales cualidades cosméticas del chocolate es su alto contenido en antioxidantes, capaces de combatir los radicales libres y, por tanto, combatir la oxidación celular. En concreto, el chocolate es rico en polifenoles (catequinas, epicatequinas y taninos), todos de la familia de los flavonoides. Una de las ventajas añadidas de los flavonoides es su capacidad de reducir la inflamación de los vasos sanguíneos y, de esta forma, mejorar la microcirculación. De toda la gama del cacao, el más rico en antioxidantes es el cacao en polvo, más que el chocolate negro o el chocolate con leche.

Cremas basadas en el cacao
Basándose en este poder antiedad, la línea de cosmética natural Nuxe ha lanzado la gama Phytochoc, que combina tres activos rejuvenecedores basados en el cacao, ya que a los polifenoles se han añadido proteínas de cacao, que tienen poder nutritivo y un ligero efecto tensor, así como otros componentes del cacao (insaponificables), de gran capacidad hidratante y de retención del agua.