A pesar de estar considerada como una de las etapas más bonitas de la vida de una mujer, cada vez son más las celebrities que normalizan las partes "menos buenas" del embarazo y del postparto: Elena Furiase, feliz con la llegada de su pequeña Nala, también recuerda que las noches sin dormir, las ojeras o los cambios de humor son habituales y ha lanzado un mensaje de ánimo a las "nuevas mamás"; desde que tuvo a sus gemelas, Julieta y María, Ariadne Artiles se ha mostrado muy abierta acerca de la diástasis abdominal que sufre tras el parto; o Dafne Fernández, quien poco después del nacimiento de su segunda hija compartió una foto de sí misma junto a la que explicaba, "No os voy a mentir, no me siento bella, pero me siento orgullosa de mi cuerpo". Violeta Mangriñán es otro ejemplo de lo mucho que agradecen los fans cualquier contenido real y cercano sobre la gestación, como en sus últimas publicaciones donde reconoce que no lo está pasando bien.
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Violeta Mangriñán se encuentra en la semana 38ª de su embarazo y, teniendo en cuenta que el trabajo de parto comienza normalmente entre la 37ª y la 42ª, le queda muy poco para conoce a Gala. La influencer ha compartido con sus fans varias ecografías, la fiesta en la que descubrió que tendría una niña, cómo ha ido cambiando su cuerpo a lo largo de los trimestres y, ahora que se encuentra en el último, que sufre algunos síntomas habituales de la recta final: "No entiendo la bipolaridad que se gasta mi cuerpo conmigo, estaba tan happy haciendo cosas de casa, escuchando música y pensando que hacerme para comer, me encontraba estupendamente y de repente me han entrado unas náuseas horribles y he vomitado como si fuese la niña del exorcista".
Además de las náuseas, Violeta añade con humor: "No tengo ardor, tengo FUEGO 🔥, normalmente me aguanto y trato de poner remedio casero pero es que es insoportable", ha revelado camino de la farmacia. Aparte de explicar detalladamente el mal rato que está pasando, tiene un consejo para sus seguidoras: "A las futuras mamás, id sacando libreta y boli y apuntad. Cuando os digan, 'el embarazo es maravilloso', decid 'sí, pues el último mes es... lo más. Es ideal. Maravilloso", ironiza la valenciana. "Alrededor del 80% de las mujeres embarazadas sufren de náuseas, comer poco y con frecuencia, mantenerse hidratada y usar pulseras de acupresión son cosas que pueden ayudar", apunta Paula Camarós, matrona que colabora con la empresa espcializada en maternidad y lactancia Lansinoh España.
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La futura mamá también ha hablado de la hiperpigmentación hormonal: "Ojito las pedazo de manchas que me han salido con el embarazo, "melasma gestacional se llama" pues lo maldigo con todas mis fuerzas y más vale que se vaya después de dar a luz, con lo bien que tenía yo mi piel", se lamenta la influencer. Los expertos explican que el problema suele afectar a la zona de la frente, como en el caso de Violeta, a las mejillas, al mentón y al labio superior y que, aunque esté provocado por desajustes a nivel interno, el sol lo acentúa por lo que la fotoprotección sigue siendo fundamental a la hora de combatirlo.
Las Dras. Mar Mira y Sofía Ruiz del Cueto, de la Clinica Mira+Cueto, aclaran sobre este tipo de mancha que "se conoce también como cloasma o paño del embarazo. Son una condición crónica de la piel, su manejo es complejo y debemos seguir un tratamiento en el que unamos fuerzas de despigmentantes sin olvidar la base que es evitar la exposición solar directa en la cara y usar FPS 50 a diario". Por último, los expertos desaconsejan el contacto con el sol durante las horas centrales del día y recomiendan sombreros, gafas de sol y otros accesorios que actúen como escudo extra frente a los rayos UV.
