Nicole Kidman y la bebida quemagrasa con la que sustituye la cafeína

La actriz ha encontrado la forma de equilibrar las tazas de café que toma al día

Por hola.com

La estrella de Hollywood vive un gran momento profesional gracias a la serie ‘Big Little Lies’, que produce y protagoniza junto a su amiga Reese Witherspoon. En lo personal, Nicole Kidman también tiene suerte pues su marido, Keith Urban, no duda en proclamar el amor que siente por la actriz. Recientemente, Nicole ha revelado que el cantante country es quien le prepara el café todas las mañanas, pero esa es la única vez que lo toma: “Durante el resto del día bebo polvo de matcha. Normalmente lo mezclo con leche de almendras en un espumador, y está delicioso”. Aunque su contenido en L-teanina haga del matcha una bebida energizante, también consigue reducir el estrés y mantener la mente en calma.

El 'matcha' es una de las alternativas favoritas de las celebrities para reducir la dosis de cafeína diaria y Gwyneth Paltrow, Jessica Alba o Elsa Pataky ya han hablado de las bondades de esta bebida con origen en China y Japón. Entre algunos de sus beneficios, su poder detox es uno de los más interesantes pues concentra la misma cantidad de antioxidantes que diez tazas de té verdes juntas. También se le han descubierto propiedades quemagrasas y diuréticas, por lo que se convierte en un gran aliado de aquellas que necesiten ayuda con la retención de líquidos.

Como ha revelado a People, la estrella utiliza leche de almendras para mezclar los polvos de matcha, una alternativa a la de vaca ideal para quienes tengan intolerancia a la lactosa. Además, con respecto a otras leches vegetales como la de soja, la que elige Nicole tiene menos calorías y es muy rica en vitamina E, otra sustancia antioxidante que combate la formación de radicales libres, los principales causantes del envejecimiento prematuro de los tejidos.

Sin embargo, la FEN (Fundación Española de Nutrición) avisa de que el 80% de los españoles tienen unos niveles de calcio inferiores a los saludables, un hecho que relacionan con la costumbre de sustituir la leche de vaca por sus alternativas vegetales (soja, almendras, avena, etc.), aunque no se padezca intolerancia a la lactosa. Y es que, la leche de origen animal aporta más calcio y proteínas que las nuevas bebidas de moda.