¿Cómo cuidan su pelo las peluqueras?

Cada cuánto lavan su melena, cuáles son sus productos indispensables... Dos expertas nos detallan su rutina de cuidado capilar

Por Pilar Hernán

Tal vez suena un poco exagerado, pero no le falta un punto de verdad a la afirmación de que quien encuentra un peluquero de confianza, encuentra un tesoro. No es fácil dar con esa persona que entiende a tu cabello, lo que quieres en cada ocasión y sabe sacar lo mejor de él, sin 'desastres capilares' de por medio. Y los buenos expertos no solo cortan y dan color a nuestra melena, sino que nos dan los mejores consejos para cuidarla, partiendo de la base de que no hay peinado bonito sin un cabello sano. Por eso, nos surge la curiosidad de cómo cuidan ellas, las peluqueras, su pelo. Si siguen una serie de hábitos, tal vez nos interese tomar nota para apuntarlos también en nuestra rutina o consultarlo con nuestra estilista de cabecera. 

Hemos preguntado a María Baras, directora creativa de Cheska, sobre los cuidados que le da a su cabello, que nos cuenta que es liso natural y fino, con un color cobrizo dorado. “Lo que más me exige mi cabello es llevar el color perfecto y el corte, que aunque parece que es sencillo, por las características de mi pelo, lo cierto es que me exige tenerlo impecable. Llevo una melena media con base recta y un capeado invisible, que me aporta volumen y movimiento a la melena. Y el flequillo también hay que retocarlo a menudo. Por eso, me hago el color cada mes y el corte cada dos meses. Opto por la coloración natural, con barros y óleos”.

Aceite y champú en seco

La directora creativa de Cheska explica también que, al tener el pelo fino y delicado y retocarse la coloración cada mes, tiene que tener mucho cuidado y se lo peina poco, aunque reconoce tener suerte, pues le queda bien sin demasiado esfuerzo. “Me lo seco con el secador con la cabeza boca abajo para darle cuerpo y volumen y me pongo un poco de aceite en las puntas”, nos cuenta, y nos habla así del que es uno de sus aliados básicos: el aceite. ¿Cómo y cuándo lo usa? “Siempre antes de secarme el pelo y de desenredarme me aplico un aceite de medios a puntas. Aunque mi pelo es fino y con tendencia grasa, el aceite en medios y puntas es la forma de fortalecer mi cabello y no alterarlo. Así lo protejo, no solo del secador, que no uso mucho como decía, sino del frío, del cloro en la piscina… Me ayuda a proteger mi pelo y a que la punta no se me parta y esté fuerte", explica y da el truco para que no engrase: ponerlo en mojado. "Yo lo hago hasta antes de desenredarlo, porque mojado el pelo es más delicado y si lo desenredas sin haberte puesto nada, especialmente el pelo fino, lo puedes partir. Las melenas de cabello fino hay que intentar no agredirlas mucho”, nos cuenta.

Al margen del aceite hay otro básico en su neceser, sobre todo cuando viaja, especialmente en avión, el champú en seco. “Tengo el pelo con tendencia de raíz grasa y se me ensucia mucho, por lo que en mi neceser siempre está este producto, es la forma de que mi pelo vuelva a coger volumen y cuerpo”, explica María Baras, que nos cuenta que siempre lo usa en la raíz para texturizar el cabello. ¿Y con qué frecuencia lo lava? “Me lavo el cabello todos los días, tiene tendencia grasa, y más llevando flequillo, se ensucia mucho. Uso un champú para cabello fino y acondicionador siempre. Da igual como tengas el pelo, se lo digo a mis clientas, aunque tengas el pelo graso, en la punta hay que poner un poco de acondicionador, eso sí, que sea ligero”, nos dice, y nos recomienda para finalizar dos tratamientos que también le regala a su cabello: “Me hago tratamientos de hidratación, porque aunque tenga la raíz grasa, la punta es más seca. Me encanta el tratamiento de proteínas y aminoácidos que hacemos en Cheska y también el tratamiento botánico con barros que me da muchísimo volumen en la raíz y me cuida la punta”.

La hidratación, fundamental

Mientras, la peluquera Diana Daureo también nos ha confesado algunas claves de su rutina de cuidado capilar. “Cada dos días lavo y acondiciono de raíz a puntas para mantener la hidratación del cuero cabelludo. Más tarde, quito la humedad a toquecitos y no frotando para evitar el frizz, aplico spray para relajar y calmar la cutícula y desenredo el cabello empezando por las puntas había arriba con un cepillo especial para no partir el pelo. También, preparo un cocktail en la palma de la mano con aceite nutritivo y una crema para potenciar el gesto natural del pelo además de añadir aminoácidos y dejo secar el cabello al aire dándole forma con las manos para lograr una onda natural”, nos cuenta. Recurre también a dos tratamientos para apotar un extra a su melena: el Tratamiento Bio-Detox Capilar una vez por semana porque limpia y detoxifica el cuero cabello y la fibra capilar, además de eliminar también la saturación de residuos que el cabello absorbe día a día y le impide y una correcta oxigenación. Y, después del detox, Hidratación Coraza, que además de aportar la hidratación necesaria, reconstruye el núcleo interior del cabello y repara el daño producido por agentes químicos.