Bella Hadid, Irina Shayk o Doutzen Kroes, son solo algunas de las tops que han destapado a través de Instagram un truco profesional de backstage que todavía no era de dominio público. Los maquilladores lo llevan usando desde hace mucho tiempo y, además de su utilidad para despejar el rostro sin estropear el peinado, parece que las supermodelos le ven potencial estético pues tanto Bella como Irina lo han inmortalizado en dos instantáneas con la misma finalidad: desearle un feliz cumpleaños a Donatella Versace, la icónica diseñadora italiana que cumplió 63 años este mes de mayo. El secreto consiste en sujetar el pelo con horquillas rodeadas por fundas de plástico, la mejor forma de mantener la melena intacta durante los retoques de maquillaje.
Aunque las horquillas tradicionales estén viviendo su momento de gloria en el terreno del street style, no suponen la mejor opción para recoger el pelo mientras se crea un look de belleza. La razón es que sus bordes metálicos dejan marcas en el pelo una vez se retiran, siendo estas rayas mucho más visibles en los mechones delanteros. Por eso, los maquilladores utilizan una versión más delicada de estos pasadores en la que los dos extremos se encuentran acolchados con fundas de plástico y, de esta forma, no dejan huella sobre el cabello.
Este truco será de mucha utilidad cuando se utilizan herramientas de calor para moldear el pelo como planchas, secador o tenacillas, ya que el cabello caliente se marca con facilidad y esa huella no se elimina con un simple cepillado, sino que habría que volver a realizar el peinado desde cero. Para poner la técnica en práctica, tan solo hace falta colocar cada un par de horquillas a lo largo de la línea de crecimiento del pelo, con lo que se facilita la aplicación de base de maquillaje o polvos bronceadores en esta complicada zona que a veces queda olvidada y termina con un antiestético ‘efecto máscara’ con respecto al resto de la cara.
Además de poder encontrar este accesorio profesional en plataformas online como Amazon, también se pueden fabricar con un método casero que consiste en colocar dos rectángulos de cartón entre el pelo y la horquilla para evitar que el material metálico entre en contacto con la melena, un DIY igual de efectivo que la versión de peluquería.
