Su radical cambio de look nos dejó sin palabras. Laura Escanes nos sorprendía a finales de 2017 con su nueva imagen, diciendo adiós a su melena y apostando por un corte pixie solo apto para las más atrevidas. Han pasado ya unos meses y la mujer de Risto Mejide parece encontrarse encantada con su nuevo estilo, con el que se sintió cómoda desde el primer momento, cuando explicaba que ya llevaba tiempo intentando cortárselo, pero no se acababa de atrever a dar el paso. "Al final el pelo crece. Yo estoy contenta, creo que me queda bien. Me veo como más atrevida, para cortarse el pelo así, tienes que tener carácter y yo lo tengo", confesó Laura entonces.
Corte cada tres semanas y champús violeta
Ahora, la propia influencer ha compartido un vídeo en su canal de YouTube, en el que responde a las preguntas de sus seguidores, y una de ellas era sobre los pros y los contras de su boycut. "La parte que más odio es que crece súper rápido y me lo tengo que ir cortando cada dos o tres semanas máximo. Y la parte buena es que es muy cómodo, salgo de la ducha, lo seco un poco con el secador, me lo despeino un poco, porque me gusta como queda despeinado y ya está", explica Laura, a la vez que cuenta cómo fue el proceso para conseguir el color, para el que confió en los profesionales de Salón Toro, que buscaron un corte versátil, fresco y juvenil. "Me hice dos decoloraciones el día que me hice el cambio de look y no me quedó con este tono tan gris. Así que me hice otra decoloración y luego me he retocado con muchos matices, para que tirara a blanco, también opté por otro más gris… Y para lavarme el pelo utilizo champús violeta o azules para quitar los matices más amarillos", cuenta Laura sobre su rutina para cuidarlo, que incluye el uso de estos productos especiales para cabello decolorado. Reconoce, además, que le gusta como lo lleva ahora, con la raíz crecida, dando pie a ese juego de tonalidades claras y oscuras.
Lee también: Dulceida y Laura Escanes se desnudan para protagonizar el vídeo más emotivo y reivindicativo
En el vídeo, además, Laura Escanes no solo habló del pixie. También compartió con sus seguidores cuál era el que considera el punto débil de su belleza, respondiendo a una pregunta sobre un complejo que solo ella conociera. "Todas tenemos esa parte del cuerpo que no nos gusta, o que tal vez nos han criticado, y a lo mejor es nuestra parte más débil. En mi caso siempre me han criticado las piernas y yo creo que de tanto escucharlo hasta me lo he creído un poco. Que si tengo las piernas gordas, que si soy bajita y tengo las piernas cortas… Yo creo que mi complejo es este y por eso siempre intento parecer más alta en las fotos", cuenta la influencer, a la ves que matiza que mide 1,71.
Eso sí, deja para el final el mensaje más importante, claro y directo al respecto: "Cada uno tendrá sus debilidades, pero lo que tenemos que hacer es que esas debilidades se conviertan también en nuestro punto fuerte, porque a lo mejor a nosotros no nos gusta, pero a otra persona es lo que más le gusta de ti".
