Madres en la década de los 20

Perfumes para sentirse especial.

Por hola.com

Desde un punto de vista físico, este es un momento excelente para ser madre. El cuerpo lleva muy bien no sólo el embarazo en sí, sino que también se recupera a gran velocidad. En cuanto a los cambios físicos inmediatos, ¡que no cunda el pánico! Poco a poco, los músculos abdominales vuelve a su sitio y esos kilos de más ganados durante el embarazo desaparecen. Durante los seis meses posteriores al parto no conviene hacer dieta, lo que no significa que no se puede controlar lo que se come, evitando los alimentos muy ricos en grasa y harinas y tomando mucha fruta y verdura. El ejercicio ha de ser suave, pero constante. ¿Por qué no aprovechar los paseos del bebé para hacerlos a buen paso y mantenerse en forma? Y cuidado con la espalda. Hay que agacharse siempre doblando las piernas, no la columna. No sólo nos evitaremos dolores y problemas, ¡sino que encima tonificaremos muslos y pantorrillas!

Propuestas de regalo
Cuando llega un bebé, toda la atención pasa a centrarse en el nuevo ser, ¡especialmente la de la madre! Por eso agradecerá especialmente aquellos obsequios únicos, con un toque ligeramente extravagante: es el momento de regalarle justo aquello que ella no se permitiría. Por ejemplo, la edición limitada de su perfume favorito. ¿Y cómo olvidarse del extracto, la expresión más elegante de cualquier fragancia? Es la fórmula más pura, aquella que se aplica gota a gota en los pulsos y que se funde con la piel durante horas.