Las celebridades que conocemos y tanto admiramos ponen en práctica todo tipo de medios para parecer magníficas. Y uno de ellos es vigilar lo que comen. Aunque puede que la mayoría de nosotras no pueda permitirse pagar bromatólogos y «chefs» personales, eso no significa que no podamos probar algunas de sus técnicas para nosotras mismas. Se pueden aprender con el libro Celebrity Slimming Secrets (Secretos para adelgazar de las celebridades), de Adele Parker, donde algunas de estas famosas revelan sus dietas secretas.
Estos tipos de dieta quizá no nos hagan ganar un Oscar o un Grammy, pero pueden llevarnos a tener más seguridad en nosotras mismas y a sentirnos más a gusto con nuestro propio cuerpo. Como complemento, el prestigioso doctor Jean-Michel Cohen, especialista en nutrición y en regímenes especiales, hace un comentario a las dietas que cada una de ellas practica.
ELIZABETH HURLEY
Seis cuencos de sopa al día durante siete días, acompañados por verduras, frutas y proteínas en el cucharón: ¡No le hace falta nada más a la ex novia de Hugh Grant para perder hasta 4,5 kilos sin pasar hambre!
Una sopa de berros: rehogar una cebolla en dos o tres cucharadas de caldo de ave desgrasado, añadir dos patatas pequeñas en dados y el resto del caldo, llevar a ebullición, y tres minutos antes de finalizar la cocción, incorporar tres gruesos manojos de berros, sin tallos y lavados; luego pasar por la licuadora y salpimentar.
La opinión del doctor. Para ser equilibrado, este régimen, que tiene alrededor de 600 a 800 calorías por día, necesitará más féculas (tres cucharadas de arroz o una patata por día), proteínas (bajo forma de huevo, de un gran valor biológico) y comprimidos de vitaminas y de potasio. Una vez terminado, se tendrá que pasar, para no recuperar peso, por un régimen de 1.400 calorías al día, antes de volver a una alimentación normal.
