El pasado 16 de abril Jane Fonda presentó, ante la Corte del Condado de Fulton, en el estado norteamericano de Georgia, la solicitud de divorcio de Ted Turner, el fundador de la CNN. Pocos días antes, Jane Fonda, acompañada por su hijo Troy y la novia de éste, la diseñadora Laura Mikeal Bridge, nos abrió las puertas de su casa y de su corazón.

Dentro de poco tiempo, la actriz, que vive en un apartamento hecho en una antigua fábrica de algodón en Atlanta, tendrá preparada la que será su casa definitiva. Jane reconoce que está atravesando la mejor etapa de su vida: “He estado buscándome a mí misma mucho tiempo. Y, la razón por la que ahora soy feliz, es que me siento bien en mi piel. Para una mujer de mi edad, vivir sola es difícil si no estás a gusto contigo misma.”.

Casada en tres ocasiones, la actriz es madre de dos hijos, Vanessa, de 33 años, a quien tuvo con Roger Vadim y Troy, nacido de su relación con Tom Hayden. Jane no duda al hablar de su relación con ellos, al igual que recuerda especialmente a su padre, Henry Fonda: “Era ciertamente una persona muy severa pero enormemente íntegra. Tenía valores maravillosos como norteamericano. Para mí, y creo que para todo el mundo, representaba lo mejor de este país”.

Los lectores podrán encontrar las mejores declaraciones de una actriz que, en la plenitud de su madurez, ha conseguido conocerse a sí misma. Su juventud, su trabajo, su participación en movimientos pacifistas, sus ideas y convicciones y el amor, son algunos de los temas abordados.


Jane, en una divertida imagen ante la escalera de caracol que lleva al dormitorio de su apartamento

Una imagen de Jane Fonda en el salón de su apartamento junto a su hijo Troy y a la novia de este, la diseñadora Laura Mikeal Bridge

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