El sector de la flor prevé uno de los mejores Sant Jordi

Se espera vender siete millones de rosas de buena calidad gracias al frío. El hecho de que la fiesta caiga en lunes incentivará las ventas

Por hola.com

Vilassar de Mar (ACN)

El sector de la flor sonríe optimista ante la cita del próximo Sant Jordi. Se prevé que sea uno de los mejores de los últimos años tanto cualitativa como cuantitativamente, según ha explicado a ACN el presidente del Mercado de Flor y Planta Ornamental, Jordi Rodón. El frío del mes de febrero ha hecho crecer las rosas producidas en Catalunya "más fuertes y rojas" y el hecho de que la fiesta caiga en lunes hace prever unas muy buenas ventas, de hasta siete millones de rosas. Un 30% son de producción autóctona, principalmente cultivadas en el Maresme, mientras que el resto serán de importación. Colombia y Ecuador se llevan la mayor parte de las compras, pero también llegarán de países emergentes de Asia y África.


"Somos muy optimistas. Ya estamos asentados en la crisis y Sant Jordi este año cae en lunes, lo que nos hace pensar que las ventas irán bien". Así de optimista se muestra el nuevo presidente del Mercado de Flor y Planta Ornamental de Catalunya, Jordi Rodón. "Lo mejor que nos puede pasar es que Sant Jordi sea día laborable y si además cae en lunes las estadísticas dicen que cae en muy buena fecha", augura.

Además de la benevolencia del calendario, Rodón asegura que este año se respira "un sentimiento muy fuerte de que la rosa será más que un regalo". Según el portavoz del sector, habrá "una rosa para todos", tanto para hombres, como mujeres, como niños y "teniendo en cuenta que somos casi 6,5 millones, se prevé que llegamos hasta los siete millones de rosas vendidas" .

Esta es la cifra a la que prevé llegar el sector y de momento, los datos apuntan por el buen camino: "La producción autóctona está totalmente vendida y la que se ha comprado en el extranjero se ha comprado pensando en que se llegará los siete millones de rosas". Rodón celebra el salto cuantitativo respecto al año pasado, cuando Sant Jordi coincidió con Semana Santa y las ventas en encallaron en llegar a los cinco millones de rosas.

También habrá un santo cualitativo en cuanto al producto como consecuencia del frío intenso del pasado mes de febrero. "No hay mal que por bien no venga", comenta Rodón. Según los expertos, el frío llegó en el momento de cortar la rosa y eso provocó que los brotes que vinieron posteriormente y que son los que ahora se cortan por Sant Jordi den rosas "más fuertes y con más color".

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