Algunos tuvieron que recurrir a la ley para lograr que sus padres los reconocieran y otros esperaron al que tiempo les ablandara el corazón para lograr un encuentro con sus progenitores. Sin embargo, todos ellos lograron su objetivo: poder fundirse en un abrazo con esa arteria vital que completaba su familia.
Carlos Baute y su hijo Jose Daniel Arellán
Tenía 15 años cuando Carlos Baute se convirtió en padre por primera vez de un niño llamado Jose Daniel fruto de una relación adolescente en su Caracas natal con Náyera Arellán pero lo mantuvo en secreto. Sin embargo, tras 12 largos años de distanciamiento, diferencias y disputas legales,a Carlos Baute le pudieron los sentimientos y en 2013 reconocía su paternidad aunque no fue hasta 2020 cuando padre e hijo se reconciliaron para no separarse jamás.