Su trayectoria profesional se encontró con una nueva oportunidad no como cantante, pero sí orientando a futuras estrellas. The X Factor ha contado con ella desde 2014, un trabajo que ha compaginado con otro talent, Americas’ Got Talent, y las ocasiones puntuales en las que las chicas picantes han saltado de nuevo al escenario. Una estabilidad profesional que no se ha traducido por desgracia en su vida personal pues su segundo matrimonio con Stephen Belafonte tampoco acabó bien después de una década de amor y una hija en común, Madison. Meses después de su separación en 2017 empezaban a conocerse los detalles de su vida en común, marcada por los abusos físicos y psíquicos de Belafonte, del que pidió una orden de alejamiento debido a su comportamiento violento. Aunque Stephen lo ha negado todo, Mel B no se ha rendido y sigue peleando todavía, han pasado ya tres años, por la custodia de su hija (que pasa la mayor parte del tiempo con su padre)