Un último adiós a la altura de una diva mundialmente conocida. Así está siendo la despedida que Italia le está brindando a Raffaella Carrà, fallecida el pasado lunes a los 78 años tras una larga enfermedad que prefirió llevar en la más estricta intimidad. 

El cortejo fúnebre con los restos de la artista partía sobre las 4 de la tarde de la casa que la cantante tenía en la Vía Nemea, en la zona norte de Roma. Un coche gris con solo una corona de flores amarillas sobre el ataúd se abría pasado entre los medios, curiosos y fans de la presentadora que se habían reunido a las afueras del domicilio para comenzar un recorrido por la capital italiana antes de llegar al Campidoglio, sede del Ayuntamiento romano, donde ha quedado instalada la capilla ardiente.

Durante el recorrido por las calles de Roma, el cortejo fúnebre con los restos mortales de Raffaella Carrà ha pasado por varias instalaciones de la RAI, la televisión pública italiana, que fueron muy significativas en la vida de la artista que revolucionó la pequeña pantalla en el país transalpino. A su paso por estos lugares, los fans de la artista allí congregados han roto a aplaudir para demostrar el cariño que le tenían. 

Raffaella Carrà hizo sus primeras apariciones en la RAI en la década de los 70 y fue en los 80 cuando comenzó su triunfo y se convirtió en uno de los rostros más conocidos de la cadena. Una fama que ha durado hasta el día de su fallecimiento. No en vano, Steffano Coletta, director de RAI 1 aseguró el pasado lunes que quería proponer a Raffa, como se le conocía en Italia, para ser presentadora del Festival de Eurovisión de 2022. 

En el coche fúnebre ha viajado Sergio Japino, compañero de vida de Raffaella Carrà y el encargado de dar a conocer la triste noticia del fallecimiento de la artista. A llegada del cortejo fúnebre a la sede del Ayuntamiento, el que fuera uno de los grandes amores de la cantante ha sido recibido por la alcaldesa de la ciudad, Virginia Raggi, que le ha mostrado su afecto. 

Durante una de las paradas, en concreto frente al Auditorio Rai del Foro Itálico, el coreógrafo se ha mostrado emocionado con el aplauso de los fans de la cantante que se se habían congregado allí. "Ella era la mujer de la sonrisa. Era un personaje completo. Estoy seguro de que ahora Raffaella nos está mirando y sonriendo", ha comentado Japino al programa TG1 de la Rai que ha estado transmitiendo en directo el recorrido.

El féretro de Raffaella Carrà ha quedado instalado en la Sala de la Protomoteca del Campidoglio, sede del Ayuntamiento de Roma. A su alrededor se han dispuesto varias coronas de flores, en las que predominaba el color amarillo y fotografías de la artista en diferentes momentos de su vida. En el centro se puede ver una imagen de la cantante vestida de negro y posando con varios bebés

Siguiendo su deseo, según contó Sergio Japino al anunciar el fallecimiento, el ataúd es sencillo, de madera cruda y tras su funeral será incinerada.

Sergio Japino, con el que la artista siguió colaborando a pesar de su ruptura sentimental, ha querido permanecer cerca de Raffaella Carrà en estos momentos en los que los italianos se han acercado para mostrar su afecto a una de las figuras más relevantes de las últimas décadas en el país transalpino. 

El coreógrafo y la cantante vivieron una relación sentimental de más de una década que comenzó en los ochenta. Aunque se acabó el amor entre ellos si quedó una gran amistad. De hecho, en su última visita pública a España era Japino quien acompañaba a la presentadora.

La capilla ardiente, que se ha abierto alrededor de las 6 de la tarde, está previsto que permanezca abierta hasta la medianoche de este miércoles y que reabra el jueves para que sus seres queridos, compañeros de profesión y los fans que tenía puedan dar su último adiós a Raffaella Carrá. 

Será el viernes al mediodía cuando tenga lugar el funeral en la Basílica de Santa María en Ara Coeli en Roma, situada en la cumbre más alta del Monte Capitolino.

A buen seguro que a muchos de los fans que la artista tenía en todo el mundo les hubiera gustado poder despedirse de ella en Roma, como han hecho estos dos seguidores. Y es que Raffaella Carrà no solo era muy querida y conocida en su Italia natal.

También logró ganarse un hueco en el corazón de los españoles que en los años 90 la veían en TVE en su programa Hola, Raffaella. En el espacio, que fue líder de audiencia, entrevistó a grandes estrellas de Hollywood y destacadas personalidades y dió muestras de su desparpajo y simpatía en una sección en la que tenía que llamar a los espectadores que ganaban dinero si al descolgar el teléfono contestaban "Hola Raffaella". La presentadora se puso también al frente de otros programas como La hora de… o A las 8 con Raffaella además de diferentes galas y llegó a dar las campanadas junto a Ramón García en 1998. Pero no solo demostró sus grandes frente a las cámaras en la cadena pública, en Telecinco presentó En casa con Raffaella. 

Cientos de personas han hecho cola durante la tarde para entrar en la capilla ardiente de Raffaella Carrà y darle el último adiós. Una vez dentro, hemos podido ver como muchos de los asistentes se arrodillaban junto al ataúd e incluso lo tocaban para despedirse de la gran diva italiana.

También se ha podido observar como fans de la cantante se han acercado hasta la sede del Ayuntamiento de Roma llevando flores, la mayoría amarillas, carteles e incluso una muñeca que era una réplica de la presentadora. Una muestra más de lo importante que fue Raffaella Carrà en la vida de millones de personas que han bailado sus canciones, unos temas que quedan como su legado y han hecho a la artista inolvidable