La boda de Stella Banderas y Alex Gruszynski, celebrada el 18 de octubre en Valladolid, fue punto de reunión para toda la 'modern family' de la hija de Antonio Banderas y Melanie Griffith. Por supuesto, sus padres no se perdieron la espectacular ceremonia y, mientras que su abuela materna Tippi Hedren no pudo asistir, al enlace no faltaron Nicole Kimpel —pareja de Antonio— y los hermanos de la novia —Alexander Bauer, hijo de Melanie y Steven Bauer, y Dakota Johnson, hijo de la actriz y Don Johnson—. Sin embargo, la curiosa (y numerosa) familia no termina aquí: también estuvieron presentes otros dos hijos del protagonista de Tin Cup, a quien Stella considera de su propia sangre: Atherton Grace Johnson —hija del actor y Kelley Phleger—, quien ejerció de madrina junto a la protagonista de Materialistas y la hermana del novio, y Jesse Johnson —fruto de la unión del aclamado intérprete y Patti D'Arbanville—. Este último, junto a Alexander, protagonizaron uno de los momentos más especiales de la noche, con el que dejaron anonadados a todos los invitados.
© Días de vino y rosasAl terminar los discursos, los hermanos —así se consideran, aunque no les una la genética— se dirigieron a la zona habilitada para los músicos y, guitarra en mano, cautivaron a los asistentes con su increíble talento. Sin embargo, la habilidad de Jesse con el instrumento no es sorpresa para nadie: en octubre de 2020 publicó, junto a su banda (Blame Baby), su primer EP, Honest Answers To Your Most Private Questions, y un año más tarde compartía una recopilación de temas llamada Tresjeté.
© Días de vino y rosasArtista 360
Además de una gran maña con los compases, Jesse se desenvuelve a la perfección encima de las tablas, demostrando que no solo ha heredado la sonrisa pícara y la melenaza rubia de su padre, sino también la sensibilidad artística y el talento ante las cámaras.
Si bien su sueño era dedicarse a la música, el mayor de los hijos de Don siempre acababa en la obra de teatro del colegio, tal y como le confesó a Vanity Fair en una entrevista. Cuando le comentó a su padre la idea de seguir sus pasos, allá por el 2007, Don le afirmó que la decisión rozaba la locura, ya que "necesitarás trabajar mucho, pero te apoyaremos siempre".
© Días de vino y rosasA pesar de los padres, padrastros y madrastras que tiene dentro de Hollywood, Jesse se ha labrado su propio camino e incluso ha realizado castings para series donde su padre tenía el papel protagonista por su propia cuenta. "Era parte del aprendizaje y estoy muy agradecido a mi padre", confesaba en la mencionada entrevista, explicando que "ha sido muy estricto y me ha planteado retos que me han ayudado a crecer".
Sus proyectos se han dividido entre Estados Unidos —su debut fue en la serie Nash Bridges y fue uno de los rostros principales de Palabra de Honor— y España, donde ha participado en grandes producciones como ¿Para qué sirve un oso? y en la taquillera serie Con el culo al aire, compaginando sus rodajes en el país mediterráneo con visitar a Melanie, a quien llama "mamá", cuando pasaba temporadas en Málaga con Antonio. Además, al igual que Stella, ha hecho sus pinitos detrás de cámaras escribiendo algún que otro guion.
