Sevilla vuelve a estar inundada de ambiente festivo, tan propio de la ciudad y del que se había visto privada desde que comenzase la pandemia. Sin poder celebrar su popular Feria de Abril dos años seguidos, los sevillanos parecen haber llenado, gracias a la Eurocopa, el vacío que les dejó su fiesta por excelencia. La capital andaluza acoge el primer encuentro de la Selección Española de fútbol, y sus calles vuelven a colmarse de de sonrisas, de brindis en las terrazas, de colores (el rojo del equipo patrio y el amarillo del contrincante, Suecia)… en definitiva: de gente. Con mascarillas y manteniendo la distancia social, eso sí, pero con todo el ánimo del mundo para apoyar a la Roja con más fuerza que nunca.