Tres semanas después del fallecimiento de su marido y su compañero de vida durante los últimos 21 años, Céline Dion ha vuelto a subirse a un escenario. Esta vez, las más de 4.000 personas que abarrotaron el auditorio no esperaban oír cantar a la artista, se trataba de una noche con un único protagonista: René Angélil. El Coliseo del Caesars Palace de Las Vegas -donde tantas noches la artista encandiló con su voz- abrió sus puertas para rendir un sentido tributo a la memoria del productor musical.
La artista quiso agradecer el apoyo de los que estaban allí presentes y aseguró que se encontraba como en casa. “Este es mi hogar lejos de casa”, dijo la artista que no pudo reprimir las lágrimas. Y es que Céline interrumpió su carrera para volcarse en su marido y retomó en este lugar su espectáculo tras un año retirada cuidándole debido a su frágil estado de salud.
Presente en todo momento gracias a una gran imagen que presidía el escenario, la cantante aseguró que podía seguir sintiendo su amor. "Siento su amor en esta sala. Siento su fuerza y su calor que se reflejan en todos vosotros", confesó mientras su voz comenzaba a temblar. "René siempre me rodeaba de las mejores personas que creyeron en nosotros y siempre trabajaron duro en nuestro nombre", señaló. Luchando por contener las lágrimas, añadió: "En nombre de mi familia, gracias de nuevo por estar aquí con nosotros esta noche para este hermoso homenaje a mon amour (mi amor). René te quiero mucho”.
Con un vestido negro, la artista concluyó la ceremonia con un gracias que seguro llegó al corazón de las personas que abarrotaron el auditorio. Tras estas emotivas palabras, el hijo mayor del matrimonio, René-Charles, de 15 años, subió al escenario, junto a sus tres hermanos por parte de padre, Patrick, Jean-Pierre y Anne-Marie Angélil.
Personajes importantes de la industria del entretenimiento de Las Vegas se dieron cita para alabar la trayectoria de René. Todos ellos fueron recordando su trabajo a través de una serie de discursos y elogiaron su carácter, lo que no pudo más que conmover a su mujer. La artista fue la última en hablar y se mostró completamente agradecida por las palabras que acababa de escuchar.
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La artista ya había agradecido el apoyo recibido por sus fans durante las últimas semanas. "Mi familia y yo estamos profundamente conmovidos por el amor y el apoyo de tantas personas que han llegado a nuestras vidas durante estos últimos días", escribió en su página web. "Hemos sentido su amor por René, sus oraciones y compasión nos han ayudado durante este tiempo tan difícil... Les agradezco desde el fondo de mi corazón", continuó. La artista canadiense es madre de tres hijos, los mellizos Eddy y Nelson, de 5 años, y René-Charles, de 15 años.
