El martes por la tarde las cámaras captaban el momento en el que Raquel Bollo llegaba a la prisión de Alcalá de Guadaira, donde está Isabel Pantoja. Dada la relación de amistad que las une, se especuló con que Raquel iría a visitar a la artista aunque cuando salió del centro, desmintió que se hubiera reunido con la intérprete. “He venido a ver a un familiar, no a Isabel Pantoja. Ya habrá días para verla” comentó.
Y es que cuando se supo que Isabel había escogido dicha prisión, Raquel ya avanzó que tenía un familiar, una prima, que llevaba allí un tiempo. La colaboradora no quiso dar detalles acerca de lo que había hablado con su prima, ni si le había trasmitido cómo se encuentra Isabel. Con el gesto tranquilo ha evitado dar detalles sobre esta visita.
Precisamente ese día se había sabido que al parecer la fiscalía no ha querido hacer cambios en el embargo de los bienes de Isabel Pantoja, por lo que le resultaría complicado hacer frente al pago de la multa que se le impuso (le queda por abonar un millón de euros), dado que no podría disponer libremente de sus bienes para obtener el dinero.
Los hijos de la artista continúan con su día a día, sin hacer comentarios acerca de las muchas informaciones que se conocen sobre la estancia en prisión de su madre. Kiko Rivera continúa con sus compromisos como DJ y se apoya en su hermana María Isabel que, precisamente este fin de semana, fue a verle a una de sus actuaciones. Esta semana se ha visto además a Dulce, la niñera de Alberto, hijo de María Isabel, llevando al niño al hospital, aunque no se sabe exactamente por qué motivo. La semana pasada la familia la visitó en prisión, un encuentro muy emotivo, tal y como contó Marisa Martín Blázquez, en el que Isabel trató de mantenerse tranquila.
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