El pasado fin de semana se convirtió en el objetivo de los focos, acompañada por el hombre de su vida, Rande Gerber, derrochando glamour por la ciudad de los canales en la gran boda de George Clooney. Pero antes de viajar a Venecia, Cindy Crawford fue vista paseando por las calles de Malibú (California) junto al otro hombre de su vida: su hijo, que está creciendo a pasos agigantados.
Ha dado un gran estirón y día a día se va transformando en un hombre. Presley ya ha cumplido quince años este verano y se está convirtiendo en un atractivo adolescente. Y es que teniendo como madre a una de las top models más influyentes en el mundo de la moda durante décadas, a nadie le pilla por sorpresa.
Parece que fue ayer cuando Presley iba cogido de la mano de sus padres, a los que llegaba por la cintura, y llevaba su melena por los hombros, y ahora está tan alto como su madre, de quien ha heredado su intensa mirada, como podemos ver en esta imagen, en la que madre e hijo salen de una consulta médica.
Cindy y Rande se casaron en 1998, tres años después de que la modelo pusiera fin a su matrimonio con Richard Gere, con quien estuvo casada cuatro años, y forman una de las parejas más estables del mundo de la moda. Son padres de dos niños, Presley, de 15 años, y Kaia, quien con 13 años parece que quiere seguir los pasos de su madre en el mundo de la moda y hace dos años debutó como imagen de la línea de ropa infantil de Versace. ¡De tal palo tal astilla!
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