Mundo singular
No es niebla, es contaminación
Para el mundo, la imagen de Londres bajo un manto de neblina es casi una escena romántica. Lamentablemente en Changsha, en la provincia china de Hunan, la nube blanca que cubre la ciudad estos días no tiene nada de idílico. Es más, se trata de una cortina de esmog o niebla contaminante que poco a poco se ha ido “tragando” a la ciudad. El semáforo ambiental chino tiene cuatro niveles para indicar el nivel de contaminación del aire y del agua, donde el rojo es el más serio, seguido de naranja, amarillo y azul. La Administración Meteorológica de Changhai declaró una alerta amarilla en algunas áreas del sur.